Argentina cumplirá esta semana con la última meta pactada con el FMI 

Argentina está a US$ 150 millones de cumplir las metas anuales del programa de Facilidades Extendidas con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Las reservas del Banco Central deberían alcanzar los U$S 4.800 millones en azul durante el ejercicio 2022; y, según los números de la entidad que maneja Miguel Pesce, al viernes, se ubicaban en U$S 4.650 millones.

Si se tiene en cuenta que el ritmo de liquidación de los productores primarios alcanza en estos días un U$S 50 millones diarios, todo indicaría que el nivel de dólares necesarios se alcanzaría al terminar el año. Esto es, según el sistema financiero que trabajará cuatro días esta semana, para el jueves 29 el BCRA llegará a ubicarse en niveles de azul.

Si se tiene en cuenta que el nivel de déficit fiscal acumulado a noviembre llegó al 1,4% y que se proyecta para diciembre un 0,5/0,6%; el porcentaje final treparía al 2,3/ 2,4%; en sintonía del 2,5% final firmado y comprometido con el FMI en el acuerdo de Facilidades Extendidas.

Con respecto a la emisión monetaria, nunca estuvo en duda el 0,8% máximo. El ministro de Economía, Sergio Massa siempre eligió la alternativa de lanzamiento de deuda en pesos para cerrar mensualmente la necesidad de financiamiento, y con tasas reales; tal como manda el FMI. 

Con esta cierta tranquilidad, Argentina y el organismo que maneja Kristalina Georgieva, cumplirán con lo pactado el 25 de marzo pasado; y, por primera vez en décadas, el país llegará con tildes azules con todas las metas pactadas.

Si todo sale como espera el Gobierno, para fines de febrero el staff técnico terminará de revisar los números y porcentajes del 2022; y en marzo nuevamente el Board del Fondo volverá a encontrarse para, seguramente, firmar el cumplimiento y darle la autorización al FMI para que se discuta el 2023. Será otra historia. Mientras tanto, Sergio Massa y su equipo podrán tomar aire, al menos en este tema, hasta el segundo mes del 2023. 

Todo esto fue anticipado por el propio organismo el jueves pasado, en la última reunión del Board del 2022. En ese evento se resolvió también dar la orden de liberar los U$S 6.200 millones para que el país cumpla con los pagos de las cuotas correspondientes a los vencimientos del Stand By firmado por Mauricio Macri en 2018.

La aprobación del desembolso se realizará sin mayores críticas, ante la recomendación del staff técnico del FMI de avalar los datos ya negociados con el Ministerio de Economía argentino.

Según el "paper" elaborado por el departamento para el Hemisferio Occidental, que luego de la salida de Ilan Goldfajn está manejado temporariamente por el ingles Nigel Chalk bajo la supervisión directa de Gita Gopinath, economista indio-estadounidense y número dos del organismo; las tres metas pactadas por el país estaban en el período julio- agosto- septiembre en camino de cumplirse, más allá de los cuestionamientos habituales por la marcha de la política cambiaria, impositiva y previsional.

La tradición indica que virtualmente el FMI cerrará sus actividades (al menos las importantes) hasta el regreso de los funcionarios, lo que se dará aproximadamente hacia fines de la segunda semana de enero de 2023. Esto quiere decir que por unos 20 días mínimo, no habrá noticias (ni buenas ni males) provenientes de Washington.

Luego, hacia fines del primer mes del 2023, comenzarán los contactos desde la dirección del Hemisferio Occidental, que seguirá manejado por Chalk. Será una llamada importante; ya que será el inicio de las negociaciones finales por el cierre del 2022; y los lineamientos del 2023.

Se supone que, si todo llega a buen puerto, hacia fines de febrero próximo el organismo podría dar por aprobado este año. Al menos es en lo que se confía desde el Palacio de Hacienda; donde, se afirma, las tres metas pactadas estarán en azul. Esto es, un déficit fiscal menor al 2,5% (el acumulado hasta noviembre llega al 1,5%), las reservas superarán los U$S 5.000 millones y la emisión se sostendrá por debajo del 0,9% anual.

Recién cuando estos datos estén chequeados y fiscalizados desde Washington, se comenzará a discutir el 2023. Mientras tanto, el dinero que llegará desde el FMI servirá para cubrir la cuota de unos U$S 2.680 millones que se le deben pagar al organismo. 

"A pesar de los desafíos, consecuencia también de la guerra en Ucrania, se cumplieron todas las metas cuantitativas de desempeño hasta fines de setiembre de 2022, incluido el déficit fiscal primario, debido a fuertes controles de gastos y acciones para mejorar la focalización de los subsidios y la asistencia social", habían destacado los técnicos dle FMI al elevar el informe sobre Argentina al Board a comienzos de diciembre