Guapas

La receta de una española que elige vivir y emprender en Argentina

Al revés de muchos argentinos, esta española decidió dejar el viejo continente y emprender con su familia en las montañas de Mendoza.

Candela Orrego viernes, 27 de mayo de 2022 · 09:05 hs
La receta de una española que elige vivir y emprender en Argentina
Foto: InMendoza

En esta sección de MDZ Femme, GUAPAS, destacamos a mujeres simples, como cualquiera de nosotras, que tienen algo para contar. Seguramente este también sea tu caso. Lo que busca este segmento es inspirarnos a hacer, no importa en qué lugar estemos. La semana pasada te presentamos a Darlene Hernández, una venezolana que eligió emigrar a Argentina y fundar Dars estética, un emprendimiento que crece día a día. Hoy te traemos a Nadia Haron, farmacéutica y chef española que eligió mudarse a Mendoza, iniciar su emprendimiento y aventurarse en el mundo de la gastronomía

Nadia Haron vive en Argentina hace ya 16 años y el lugar que eligió como su nuevo hogar fue Mendoza. Estudió en España Farmacia y trabajó varios años en la empresa familiar y también en una multinacional, pero en paralelo seguía cultivando su curiosidad gastronómica. "Volvería siempre a hacer el camino tal y como lo hice", nos cuenta muy feliz Nadia. Te invitamos a conocer a esta española que no le tiene miedo al cambio y a probar cosas nuevas. Ella, lejos de querer volver a España cree que en Argentina están sus proyectos personales y laborales.

Haron se reparte entre la bodega, las cocinas y sus 4 hijos. Foto: Instagram Nadiaharons

¿Cómo descubriste tu pasión por la cocina?

En realidad mi pasión por la cocina la descubrí desde muy pequeña en casa. Con mis padres fuimos mucho -cuando éramos pequeños- a conocer restaurantes, era como todo un evento el salir y hacer el plan gastronómico. Vivimos muchos años en San Sebastián, que es una de las zonas gastronómicas del mundo, y creo que eso también nos marcó mucho.

Siempre me provocó mucha curiosidad aprender a intervenir los ingredientes para crear cosas diferentes. Tengo así como un momento flash: probablemente no tenía mucho más de 10 o 12 años y fuimos al restaurante de Martín Berasategui, allí probé un helado de queso Idiazábal completamente salado y aquello la verdad es que me voló la cabeza. Dije "¡Guau! ¡Es que somos poderosos!. con nuestras manos y nuestra cabeza podemos hacer un montón de cosas". Ese fue un punto de inflexión.

¿Por qué razón vinieron de España a la Argentina?

Fue por un emprendimiento empresarial familiar, comprar una finca en La Consulta, establecer una bodega. Con el pasar del tiempo y la construcción de la bodega digamos que una decisión llevó inevitablemente a la otra y terminamos trasladándonos aquí a vivir. Con los años eso cambió, la bodega se vendió. Pero encuentro que Mendoza es un lugar maravilloso para vivir, me parece que es un lugar donde hay muchísimas oportunidades -no solamente en lo que yo hago-, creo que el tema del enoturismo es algo que está creciendo exponencialmente, sobre todo en los últimos 10 años diría.

¿Cómo fueron los primeros tiempos en la bodega?

La verdad es que fue un tremendo desafío, en muchas ocasiones dije “es la última vez”. Recuerdo cuando arrancamos el restaurante y teníamos un evento como de unas 100 personas y aquello fue una remada en dulce de leche, tanto que dije “nunca más, ¿quién me habrá mandado a mi?”. Aparte, recién aterrizada en Mendoza con los niños muy pequeños, embarazada de la tercera, con un equipo muy poco profesional en ese momento y la verdad es que teníamos mucho camino por delante para recorrer y para aprender. De hecho considero que en gastronomía -como en todos los trabajos- tenemos que tener la mente abierta, porque la idea es seguir aprendiendo cada día, sea porque acertamos o bien porque nos equivocamos y aprendemos de los errores.

Cuando vinieron en un principio no sabían si instalarse, ¿qué los hizo quedarse?

Cuando aterricé en Mendoza no sabía muy bien cuánto tiempo nos veníamos a vivir. En un momento dado me plantee la posibilidad de hacer la convalidación del título pero también venía con un bebé recién nacido, embarazada de la tercera y el proyecto era sumarme también a la empresa familiar. (...) Cuando te dejas llevar y cuando sientes que el río te lleva dices "bueno voy a ver hacia dónde quiero ir".

Quizás ese clic fue al año de haber arrancado, coincidió justo con el primer reconocimiento que tuvo el restaurante de la Bodega O'Fournier, que fue dentro del marco de Great Wine Capitals en categoría restaurante. Aquello fue como un espaldarazo de decir "bueno, podemos seguir por este camino lo estamos haciendo bien, podemos mejorar".

Haron tiene una huerta orgánica en su casa. Foto: Instagram Nadiaharons

Aquello terminó y vos decidiste quedarte igualmente en Argentina, ¿en qué estás trabajando actualmente?

Estoy en [la bodega] Monteviejo y ya llevo más de cinco años con ellos, haciéndoles gestión gastronómica. Estoy a punto de empezar también otro proyecto con otro lugar, tengo una empresa de servicios de catering y doy pequeños servicios, no solamente a casamientos o celebraciones, también servicios empresariales o corporativos y a otras bodegas que no tienen restaurante. Un poco un poco de todo, digamos que nunca tengo dos semanas iguales unas a otras. 

Un gran misterio para los comensales, ¿de dónde surgen las ideas para nuevos platos?

La verdad es que a mí me viene en cualquier momento, casi en cualquier situación. Leo mucho de gastronomía, leo mucho de química y de fisicoquímica como vinculado pero no directamente recetas. Estoy muy pendiente de lo que pasa prácticamente en todo el mundo, no solamente en Argentina, y por supuesto en España, miro tendencias de muchos lugares.

La verdad que eso es una labor, yo no me doy cuenta pero hay veces que el teléfono me lo dice y a lo mejor he estado 4 horas en un día con el celular. (...) Yo soy de los anotadores de papel y lápiz, siempre llevo cuadernitos conmigo porque las ideas cuando no se ejecutan. se olvidan.

Después de tanto años en el rubro, ¿cuál crees que es el secreto del éxito?

La constancia y la capacitación personal. En el trabajo te pueden capacitar, pero uno siempre tiene que estar cultivándose y no quedarse. El ser curioso también tiene que ver mucho con tener una vocación, creo que es un ejercicio constante y la constancia es una de las claves del éxito y estar buscando siempre la excelencia y la superación. Estar buscándola no significa que uno sea siempre excelente ni muchísimo menos pero tenerlo así como título en todo lo que hacemos debería de ser. 

¿Tenés pensado volver a vivir a España?

Yo por ahora sigo con Mendoza, mi proyecto de vida pasa por acá y mi proyecto profesional también. A España vuelvo un par de veces al año, mis padres y mi hija mayor están allí, pero digamos que el centro de mi vida pasa por Argentina.

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