Se conoció la sanción para Tuchel y Conte tras el escándalo en el clásico Chelsea-Tottenham

La Premier League, uno de los torneos más competitivos del mundo, comenzó una nueva temporada que promete ser más atrapante que la anterior. Además, como condimento extra, en la segunda fecha tuvo lugar uno de los derbis más picantes. El empate entre Chelsea y Tottenham en Stamford Bridge dejó de todo. A lo mostrado dentro del campo de juego se le sumó el picante cruce que tuvieron ambos directores técnicos antes y después del pitazo final de Anthony Taylor. En este contexto la Football Association dio su veredicto.

Tanto Thomas Tuchel como Antonio Conte fueron sancionados por el organismo inglés. El DT alemán, del dueño de casa, fue declarado como el principal culpable por lo que deberá abonar una suma de 41.500 euros y una fecha de suspensión (la cual quedó en suspenso hasta el momento, por lo que el domingo podría dirigir ante Leeds). Por su parte, el italiano recibió solamente una multa económica, la cual equivale a 17.500 euros.

En un comunicado la FA manifiesta que: "Tanto Tuchel como Conte admitieron que su comportamiento tras el pitazo final del Chelsea-Tottenham del domingo fue inapropiado". Ambos entrenadores protagonizaron un particular momento, sobre todo post partido cuando tomados de la mano quedaron cara a cara, mientras el del Chelsea le exigía a su colega que lo mirara a los ojos cuando lo saludaba.

"Ambos pidieron dar a conocer sus razones por escrito. Las sanciones están sujetas a apelación, y la inhabilitación de Tuchel ha sido suspendida hasta que el Comité Disciplinario ponga sus sanciones a disposición por escrito", agregó el comunicado en el que se encuentran las sanciones.

Con los decibeles más bajos, este viernes por la mañana Tuchel se refirió a la situación: "No pasó nada grave. Ni nos insultamos ni llegamos a las manos. Era simplemente la pasión de dos hombres que harían cualquier cosa por su equipo. Tenía el máximo respeto por Antonio antes del partido y esto no cambia nada".

Por su parte, intentando cerrar el capítulo del cual se habló toda la semana, Conte sentenció: "Para mí, la historia terminó en Stamford Bridge. Situaciones como estas pasan. No es la primera vez ni será la última que dos entrenadores discrepen al final del partido".