Los motivos de la dura derrota de La Libertad Avanza que analiza la Casa Rosada y los cambios en el horizonte
En Balcarce 50 hay un solo tema de discusión: ¿qué pasó en provincia de Buenos Aires? La derrota puso en jaque al Gobierno, que analiza motivos y posibles cambios.

El día después de la derrota de La Libertad Avanza en Buenos Aires, el Gobierno analiza los motivos del fracaso electoral.
NAEl día después de la derrota siempre es escenario de reflexiones y la Casa Rosada no falta a esa regla. Luego de la contundente victoria del peronismo, dentro del oficialismo enumeraron las razones del fracaso de La Libertad Avanza que hoy amenaza el rumbo económico y político del Gobierno y abre la puerta a cambios en la estrategia libertaria.
Un resultado shockeante para la Casa Rosada
Los 13 puntos de distancia entre La Libertad Avanza y Fuerza Patria sorprendieron a propios y a extraños. En el Gobierno sabían que una derrota en el bastión histórico del peronismo era una posibilidad cierta, pero nunca imaginaron que sería por tanto.
Te Podría Interesar
Según explicó un funcionario que suele recorrer los pasillos de Balcarce 50, en el búnker libertario preveían una caída por 6 puntos, a lo sumo 7. La cifra final fue desoladora y puso en duda la promesa del oficialismo de obtener una victoria asegurada en octubre.
"Siempre dijimos que esto era un piso, de ahí todo para arriba", insisten en el Palacio de Gobierno, donde atribuyen tres puntos principales al fracaso libertario en pintar la provincia de violeta que no se replicarían en las nacionales.
Los tres puntos que explicaron la derrota, según el Gobierno
En un primer lugar, en el Ejecutivo ponen el foco en el ausentismo y sostienen que, como ocurrió en todas las elecciones provinciales hasta el momento, hay por lo menos un 10% del electorado que no fue a votar en comparación con las cifras habituales para una elección nacional.
Los comicios bonaerenses contaron con la participación del 63% del padrón, un número mayor al que obtuvieron la mayor parte de los distritos que desdoblaron sus elecciones, pero menor a las legislativas de 2021 (71%) y 2017 (76,75%), donde las provinciales se celebraron el mismo día que las nacionales. De acuerdo al discurso oficialista, La Libertad Avanza es quien más votos captura de esa pecera.
El segundo punto en consideración para el Gobierno fue el rol de los intendentes, que este domingo hicieron valer todo su aparato, protagonizando en muchos distritos candidaturas testimoniales y movilizando recursos propios para fiscalizar e incentivar a los vecinos de su municipio a votar por Fuerza Patria. "Los intendentes jugaron ahora, en octubre no tienen mayor incentivo para hacer lo que hicieron", aseguró un alfil libertario.
El tercer lugar lo ocupan los votos que se fugaron a otras fuerzas alternativas, como ocurrió en el caso de los hermanos Passaglia en la segunda sección electoral bajo el sello de Hechos y con el intendente de Junín, Pablo Petrecca, en la cuarta sección con la bandera de Somos Buenos Aires. Ambos son dirigentes ligados al macrismo que no cerraron con La Libertad Avanza producto de las exigencias de Sebastián Pareja y lograron capturar un tercio de los votos en sus territorios. De haber jugado juntos, se hubiera impuesto el violeta.
Según el análisis de Balcarce 50, esos votantes -y dirigentes- del PRO que La Libertad Avanza falló en seducir, volverán al redil libertario al ver la respuesta de los mercados ante el triunfo peronista: un aumento del 7% del dólar mayorista, que llegó a $1450, la escalada del riesgo país, que volvió a la zona de los 1.000 puntos básicos por primera vez desde el 24 de octubre de 2024, además de una fuerte caída de los bonos soberanos y los ADR argentinos en Wall Street, con un descenso en el S&P Merva de 13% en pesos.
Miradas alternativas: es la economía
Sin embargo, quien dio otra mirada sobre el asunto fue el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, quien llamó a hacer una fuerte autocrítica y por primera vez planteó la posibilidad de que uno de los problemas fuera el programa económico del Gobierno. "Podemos decir que la economía en lo macro está creciendo, pero eso no está llegando a la gente y es importante que llegue, porque si no la gente mira con desconfianza esos logros económicos", señaló el ministro coordinador.
"Es la opinión de él, no van a haber cambios", replicó un funcionario con despacho en Balcarce 50, dando cuenta de las diferencias de criterio que asoman por estas horas en el seno del Gobierno. El propio Luis Caputo envió un mensaje conciso tras la derrota que decía: "Nada va a cambiar en lo económico. Ni en lo fiscal, ni en lo monetario, ni en lo cambiario".
En medio de las discusiones internas y la asimilación del resultado del domingo, el presidente decidió convocar para este lunes a dos reuniones de Gabinete de urgencia, una por la mañana y otra por la tarde desde las 16.30, para definir cuáles serán los cambios en la estrategia política del Ejecutivo de ahora en adelante.
Cambios en el horizonte
En su discurso en el búnker de La Plata, el presidente juró no repetir los errores que llevaron a la derrota más importante de La Libertad Avanza desde su llegada a la Presidencia en 2023. Parte de esa reacción será para contener a los mercados, pero principalmente para reconectar con el electorado, de cara a las elecciones nacionales del 26 de octubre que se acercan cada vez más.
Hasta el momento, en el Gobierno no se mencionaba la posibilidad de un cambio de nombres en el Gabinete, pero sí se hablaba de un cambio en el esquema de poder interno del Ejecutivo, mientras el sector que se referencia en Las Fuerzas del Cielo puja por un ascenso a la figura de Santiago Caputo. Si esto ocurre, será en desmedro de Sebastián Pareja y los Menem, Lule y Martín, que quedaron contra las cuerdas luego del pobre desempeño de su armado en la provincia de Buenos Aires.
De cualquier forma, en Casa Rosada intentan manifestar optimismo y sostienen que "se puede remontar". "El peronismo obtuvo lo que suele obtener, lo que hay que ver es por qué perdimos lo nuestro", agregan. La autocrítica profunda pone en tela de juicio la gestión política, el programa económico, el escándalo por los audios de Diego Spagnuolo, o la mala elección de los candidatos. Ese análisis hoy corre por cuenta del presidente y sus allegados, que deben dar rápidamente una vuelta de página si quieren tener un revancha en octubre que les brinde oxígeno para encarar sus dos años restantes de mandato.