Fuerte descargo de Alberto Fernández a un año del atentado a Cristina Fernández de Kirchner
El presidente recordó el intento de magnicidio contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, ocurrido el 1 de setiembre del año pasado frente a su domicilio en el barrio porteño de Recoleta, y exigió a la justicia.
A un año del intento de magnicidio de la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, muchos fueron los funcionarios, legisladores y dirigentes políticos que recordaron el atentado y salieron en su defensa. El presidente, Alberto Fernández, no fue la excepción y se volcó a sus redes sociales para expresarse.
"Hace un año atentaron contra la vida de la vicepresidenta @CFKArgentina. Fue un hecho de enorme trascendencia que generó una gran conmoción social y alteró la convivencia democrática", comenzó exponiendo el mandatario en un hilo de X.com.ar, ex Twitter.
En esta línea, fue contundente y cargó contra la Justicia por su forma de llevar adelante la investigación. "La causa judicial avanzó con singular lentitud, dejando de lado pruebas determinantes y dilatando toda indagación que permitiera conocer quiénes fueron los instigadores y autores intelectuales del hecho", cuestionó Fernández.
Y a modo de conclusión, Alberto Fernández sentenció: "Cuando cumplimos 40 años de democracia, la Argentina debe preservar su institucionalidad. Parte de esa mejor institucionalidad exige que la Justicia deje de servir a ciertos poderes políticos y fácticos y se limite a hacer lo que debe hacer: impartir justicia".
Atentado a CFK: quiénes son los detenidos
En este momento las personas procesadas son tres: Fernando Sabag Montiel, quien apuntó el arma; Brenda Uliarte, señalada como coautora del hecho; y Nicolás Carrizo, líder de la banda que se conoció mediáticamente como “Los Copitos”. Los tres están cumpliendo prisión preventiva en el penal de Ezeiza desde el septiembre pasado. A Carrizo, por caso, la Justicia le rechazó en diferentes instancias el pedido de prisión domiciliaria.
El fiscal federal Carlos Rívolo, encargado de la investigación del atentado, opina que fue un acto premeditado por el agresor Sabag Montiel y su exnovia Brenda Uliarte. Cerró la investigación en lo que respecta a los tres detenidos, sin considerar aún vínculos políticos ni responsables intelectuales, que es el principal reclamo de la vicepresidenta.
Ambos fueron imputados el 15 de septiembre con prisión preventiva por el intento de asesinato a Cristina Kirchner, en un plan diagramado y planeado, que había tenido comienzo en abril de 2022. Fueron imputados como coautores de los delitos de homicidio agravado por el empleo de armas de fuego, alevosía y el concurso premeditado de dos o más personas, en grado de tentativa. Sus defensas decidieron no apelar y acelerar la llegada a juicio oral.
El tercer detenido, Nicolás Carrizo, era el jefe de ambos en un negocio que se dedicaba a la venta de “copos de nieve”. Quedó detenido 12 días después del acto luego de que entregara su celular a la justicia ya que declaró como testigo de sus empleados. En el teléfono se encontraron mensajes que lo comprometieron: “Recién intentamos matar a Cristina”; “el arma es mía” y “mi empleado le quiso disparar”, son algunos de los mensajes encontrados, correspondientes a la noche del atentado. Su abogado defensor, Gastón Marano, desde un principio adujo que eran comentarios hechos en tono de broma y le intentaba dar mayor grado de certeza al decir que fue el propio Carrizo el que entregó el celular sin ofrecer ningún tipo de resistencia.
Eran épocas de mucha tensión política, luego de que el fiscal Diego Luciani realizara su alegato en el juicio oral y público de la causa Vialidad que tenía a Cristina Kirchner en el banquillo de los acusados. Esa situación derivó en jornadas de vigilia de la militancia cristinista en el frente de su departamento en Recoleta, lugar donde se terminó inmortalizando la imagen del arma, siendo gatillada a centímetros del rostro de la vicepresidenta sin que saliera la bala.