La vacunación se complica cada vez más por la escasez de vacunas

El Gobierno apretó el acelerador con la vacunación y en menos de una semana prácticamente agotó el stock de dosis. Debido a esto, la provincia quedó frente a una posible suspensión de los operativos por desabastecimiento.

El Ministerio de Salud evitó dar información, pero varios datos parciales bastaron para demostrar que el panorama para la inmunización será complejo en los próximos días. 

Este sábado se anunció desde la Nación un envió de 17.400 dosis de la Sputnik V que servirá para estirar el operativo. Sin embargo, esto no cambia "nada" el cuadro general, se dijo cerca del Gobierno. A pesar de la noticia, Mendoza podría quedarse sin vacunas contra el coronavirus dentro de pocos días.

El "megaoperativo" para el área educativa, que se hizo en toda la provincia, terminó con más de 15.000 docentes vacunados en apenas tres días. Se trata de más del 90 por ciento del total previsto para la primera etapa. "No quedan vacunas para docentes", se informó desde la DGE.

"Tenemos para colocar lo que nos manden", agregó un funcionario, eufórico con los resultados del viernes: fueron unas 7.000 dosis las proporcionadas en un solo día, sostuvo el Gobierno Escolar.

Aunque hay muy poco para inocular, en el ámbito escolar hay una esperanza, ya que esta semana la Nación anunció que están por llegar a Argentina 3 millones de dosis de la vacuna china.

Los envíos comenzarían a ser recibidos por el país la semana próxima y un cálculo estimado hace pensar que a Mendoza le tocarían entre 120.000 y 150.000 dosis.

La vacuna del laboratorio Sinopharm no está autorizada para mayores de 60 años. Es, por lo tanto, la destinada a la mayoría de los docentes.

Pero esta luz de esperanza no se replica para el segmento de mendocinos que superan los 70 años, quienes dependen exclusivamente de la disponibilidad de la vacuna Sputnik V.

En el espacio Le Parc, sede de la vacunación para los vecinos de Guaymallén, el departamento más populoso de Mendoza, reportaron en la tarde del viernes que quedaban solamente 422 dosis. "No creo que el Ministerio de Salud tenga más que la segunda dosis para aquellos que se colocaron la primera", lamentaron en el municipio.

Guaymallén y otros departamentos de Gran Mendoza, desde el viernes, redujeron a 400 los turnos por día. Hay que recordar que a mediados de la semana se había cuadriplicado la cifra de turnos (subió de 200 a 800 por día en cada departamento de Gran Mendoza y San Martín) para acelerar un operativo que iba muy lento.

El escaso saldo de vacunas rusas obligó a reducir la intensidad. Y pese a que bajó la entrega de turnos a la mitad, hasta antes del anuncio de que llegarían algunas dosis más, a Guaymallén le quedaban vacunas para un solo día: el lunes. 

El panorama general coincide con un pronóstico del gobernador Rodolfo Suarez, quien durante los festejos vendimiales había indicado que en Mendoza se acabarían las vacunas este fin de semana.

Es más, cerca del mandatario se sostuvo que "están todas las provincias igual, en la dulce espera". "Se han pedido más dosis, pero no hay", sentenciaron.

"La épica kirchnerista publicaría la llegada de aviones con vacunas, pero los aviones no han despegado", chicaneó el intendente de Guaymallén, Marcelino Iglesias.

¿Cuánto tiempo durará el parate posterior a que se acabe la disponibilidad de vacunas en la provincia? Por lo menos una semana, estiman en el oficialismo. Y advierten que un freno así complicará la pretensión de vacunar a buena parte de la población antes de mediados de año.

Paradójicamente, el registro nacional de vacunas arroja datos menos alarmantes. El Monitor Público de Vacunación decía hasta este viernes que en el país se habían aplicado sólo 2.2 millones de dosis, a pesar de que se habían distribuido muchas más: 3,4 millones.

Para Mendoza, los datos oficiales del Ministerio de Salud de la Nación indicaban que la provincia había recibido 143.850 dosis, de las cuales se habían colocado solo 79.064.

El Gobierno provincial ya aclaró que hay una demora en la carga de información que hace que los datos del Monitor no sean los más actualizados. Señala además la diferencia de componentes entre la primera y la segunda dosis de la Sputnik V. Esto hace suponer que hay segundas dosis guardadas para quienes recibieron la primera.

Suarez, en tanto, no tiene ninguna intención de minimizar el problema de la escasez de vacunas. Por el contrario: probablemente aceleró la vacunación esta semana para dejar a la vista los problemas de los encargados de proveerla.

"La Nación tiene que suministrar las vacunas y el pedido siempre está hecho", se dijo en la Casa de Gobierno este fin de semana. La declaración brotó con naturalidad y sin culpa: a otro le toca solucionar, esta vez, el problema. Aunque estamos hablando de algo tan serio como la carrera contra la segunda ola del coronavirus.