El dramático relato de la madre de cinco hermanos asesinados: "Temo por la seguridad de los que me quedan"
Paula Chávez, madre de los hermanos asesinados, recibió a MDZ en su casa del barrio Campo Papa. El duro relato y la esperanza de vivir en un lugar mejor.

Paula Chávez, la madre de los cinco hermanos que fueron asesinados en Godoy Cruz.
Marcos Garcia / MDZHace unos 15 años que una familia mendocina comenzó a sufrir una trágica seguidilla de muertes, la cual, hasta ahora, parece no tener fin. Entre 2010 y este año, cinco hermanos fueron asesinados en diferentes circunstancias y sólo uno de los casos se resolvió.
El caso más reciente ocurrió hace exactamente un mes, el viernes 5 de septiembre, cuando Leonardo Nazareno Montecino Chávez fue ultimado a puñaladas en el oeste de Godoy Cruz.
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Luego de padecer por quinta vez la partida de un hijo, Paula Chávez, madre de las víctimas, recibió a MDZ en su casa del barrio Campo Papa y relató cómo se vive en uno de los sectores más calientes de la provincia, en medio del temor a que vuelvan a atentar contra la vida de sus seres queridos por el contexto de violencia que los rodea: "Temo por la seguridad de todos los que me están quedando", aseguró la mujer de 72 años.
La madre de los cinco hermanos asesinados y un doloroso testimonio
Los Montecino Chávez no vivieron siempre en la popular barriada localizada en el distrito de Villa Marini. Hace más de una década, tenían una casa en las inmediaciones del estadio Feliciano Gambarte, pero fueron reubicados por unas obras de modernización del canal Cacique Guaymallén, con la promesa de que les iban a entregar una vivienda en un barrio del IPV. No obstante, esa propuesta quedó en la nada y la familia terminó en el Campo Papa, donde residía una de las hijas de Paula.
"Yo tenía mi casa en la que vivía con todos mis hijos, por razones de que yo estaba sola con mis niños perdí una casa en un barrio y tuve que venir a vivir acá. Cuando llegué yo tenía todos mis hijos, pero por motivos y cosas los he ido perdiendo", explicó afligida la septuagenaria.
Para ese entonces, Paula aún trataba de superar la muerte de Andrés, el primero de sus hijos que fue víctima de un asesinato. En su momento, el caso no tomó relevancia mediática, pero la mujer reveló que lo mataron de un balazo mientras trabajaba como cuidacoches en las cercanías de la cancha de Godoy Cruz.
A partir de allí, la tragedia se volvió parte de su vida, ya que cinco años después recibiría un nuevo golpe: el viernes 16 de enero de 2015, su hijo Sebastián Emanuel Montecino Chávez, alias el Kechu, de 20 años, fue acribillado de nueve balazos en el cruce de Salvador Arias y Entre Ríos, a pocas cuadras de su domicilio. "A mi hijo Sebastián lo habían invitado a tomar una cerveza y comer algo. No volvió, me lo mataron", recordó la mujer.
Sólo cuatro años pasaron para que la muerte volviera a llamar a su puerta. Fue durante la noche del domingo 8 de abril de 2019 cuando Adolfo Montecino Chávez fue agredido con arma blanca en el barrio La Paz, recibiendo un puntazo en el pecho que fue letal. "Adolfo estaba trabajando y se fue con amigos a comer un asado. Le dieron dos puntazos y quedó tirado en la calle sin recibir ayuda ni apoyo de nadie. Nunca llegué a saber bien los motivos".
Un par de años más tarde, el viernes 27 de febrero de 2021, la historia se repitió con Jonathan Iván Montecino Chávez, de 32 años, quien fue atacado a traición mientras se encontraba con amigos en el cruce de calles Chapadmalal e Illia, en el Campo Papa. Le dieron dos tiros con una pistola calibre 9 milímetros y perdió la vida en cuestión de minutos.
"Jonathan estaba trabajando en la construcción. Vino, se bañó y se volvió a ir con los compañeros. Saliendo del barrio le pegaron dos tiros y lo perdí", rememoró Paula entre lágrimas y destacó que fue el único de los crímenes de sus hijos que tuvo resolución, ya que la investigación terminó a fines del año pasado con la condena de Brian el Colo Serrano a 12 años de cárcel: "Fue gracias a un fiscal que me ayudó y todo se pudo esclarecer".
El crimen más reciente
Por último, la mujer revivió su última pérdida: "Últimamente, me pasó con Leo. Se fue de la casa con su compañera y también me lo mataron. Así he ido perdiendo a mis hijos, también perdí un nieto", señaló en referencia al crimen de Lucas Ariel Torres, quien también fue asesinado en el Campo Papa el 17 de diciembre de 2020. Por ese caso, fue condenado Patricio Emiliano Garrido, yerno de la jefa narco Sandra Jaquelina Vargas, más conocida como la Yaqui.
"Lo que me queda ahora es pensar en mis niños y mis hijas. Poder obtener algo e irme de acá porque no encuentro salida", reflexionó Paula y añadió que tiene que "seguir al frente" por los que aún están vivos, pero que también le gustaría saber los motivos por los que fueron asesinados sus cinco hijos.
"Espero que Leo no quede como uno más, ya que quedó tirado en la calle y me dicen que nadie sabe nada. Eso es feo y triste", expresó la mujer desde el living de su casa, cuyas paredes están decoradas con las fotos de sus hijos que ya no están.
La vida en el Campo Papa
Antes de finalizar la charla, la mujer contó cómo se vive el día a día en una de las zonas más peligrosas de Mendoza, marcada por la venta de drogas, los ajustes de cuentas y enfrentamientos armados, donde también perdió a cuatro de sus hijos: "La estoy pasando mal con mis niños chicos (sus nietos). A veces con miedo, ya que cuando estábamos velando a mi hijo (Leonardo) recibimos algunas amenazas".
Pese a eso, Paula hace todo lo posible para alejar a sus nietos de la calle: "Tengo mis niños que van al club y las chicas a la escuela, pero temo por la seguridad de todos los que me están quedando", confesó, exponiendo su deseo de salir del Campo Papa y así poder vivir en paz y sin temor.