Otras dos escuelas mendocinas sacudidas por denuncias de abuso sexual
Se trata de establecimientos en Guaymallén y en Capital. Lo ocurrido se suma, además, a otros dos casos que se conocieron en el transcurso de sólo ocho semanas. Las estudiantes dicen que callaron durante mucho tiempo pero que ya no se quedarán en silencio ¿Qué pasa con los protocolos?
Son las 10 de la mañana y la calle Olascoaga (San José, Guaymallén) está cortada por varios grupos de alumnas muy enojadas. En sus gestos se mezcla el candor adolescente con la bronca: sienten que no las escucharon y ahora es como si estallaran. La puerta de la escuela "Santa Teresita" amaneció con afiches donde se puede leer el relato de lo que algunas de las chicas dicen haber sufrido a causa de un profesor.
"Ayer, unas alumnas de cuarto año de secundaria fueron a hablar con las autoridades porque este docente -que da una materia vinculada a la religión- se comportaba de una forma incómoda para ellas, con gestos y roces. Según nos contaron, les respondieron que esta persona no tenía antecedentes. Pero aparecieron chicas de quinto para contar que a ellas les había ocurrido lo mismo con este señor. Ahí empezó a gestarse la protesta", cuenta a MDZ el papá de una de las estudiantes, que pide reserva sobre su identidad.
Sobre la calle, P. (17) aseguró a este diario que ella sufrió acoso por parte del docente e intentó hablar con quien está a cargo de la institución: después de escucharla, se le recomendó que tuviera paciencia y que "no les comentara nada a sus padres".
Tal vez por eso es que en las paredes de la cuadra hay frases como "no nos callamos más" o "yo informé de esto en 2020, ¿no era una emergencia?". Incluso se habla de egresadas que se habrían acercado para relatar su experiencia.
Según un comunicado que alguien pegó en la entrada de la institución, el acusado fue suspendido hasta que se aclaren los tantos. Además, se labró una denuncia en la fiscalía. El padre entrevistado continúa: "ahora encima nos enteramos de que este hombre tenía un apercibimiento previo por haber molestado a alumnas vía Facebook, lo cual hace más preocupante todo".
En una de las columnas están los testimonios de lo que las muchachas dicen haber padecido:
Alarma
Si bien el caso anterior está siendo investigado por la Justicia y hasta que avance la causa es recomendable cierta cautela, la situación se eslabona en una serie de hechos que marcarán este 2021. En efecto, ayer se conoció otra denuncia, esta vez relacionada con un centro educativo de la Cuarta Sección de Ciudad. Allí, en la escuela "Ricardo Rojas", hay un docente -de Música- denunciado por tocar a una niña de sexto grado. Por eso actualmente se analiza si entre quienes asisten al edificio ubicado sobre calle Juan Jufré hay más posibles víctimas.
Hay más. A fines de octubre, la preocupación recayó sobre la escuela Guillermo Cano, de Guaymallén, donde luego de otra denuncia se descubrió que el acusado, un profesor de Matemáticas que trabajaba con decenas de menores, se desempeñaba allí a pesar de haber recibido una condena previa por abuso sexual que databa del 2015.
Y algunas semanas antes, fue la escuela primaria Beatriz Falcitelli de Ciudad la que estuvo en el ojo de la tormenta, después de que una nena de 12 años contara que padeció vejaciones por parte de un celador que la habría obligado a ir al baño junto a él en horario de clases, entre 2019 y el primer semestre de 2021.
Así las cosas, es obvio que los mecanismos institucionales evidencian una crisis, y que violencias que algunos lustros atrás se callaban hoy salen a la luz. La gran pregunta es si desde los espacios de gestión se tomará nota de esta nueva etapa.
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