Matías Camisani contó cómo es su difícil relación con Dolores Barreiro, después de 22 años de matrimonio

Configuraron una pareja híper mediatizada, de esas que se roban la atención de miles y miles de personas, de las que adornan las tapas de las revistas. Dolores Barreiro y Matías Camisani rompieron con los cánones de toda una época y construyeron una historia tremenda.

Todavía llama la atención la ruptura de ese matrimonio, el que los unió durante más de 22 años y que se tradujo en una familia numerosa, a partir del nacimiento de cinco hermosos hijos. A principios de 2020, los famosos decidieron ponerle punto final a su vínculo.

Claro que a partir de ese momento se puso la lupa en los argumentos que sopesaron en la balanza para romper esa unión, ese lazo que parecía indisoluble y granítico. Lo cierto es que los dos modelos reiniciaron su vida, se reencontraron con el amor en otros brazos.

Matías rompió el silencio, y sorprendió con su aparición pública, dado que no suele ser adepto a las entrevistas con su visita a PH, el ciclo de Andy Kusnetzoff en Telefe. En ese contexto, que suele estimular a las confesiones de las celebridades, arrojó una serie de declaraciones filosas.

En el contexto de la temática de quienes consideran que pueden edificar una relación amistosa con sus ex parejas, Camisani soltó una reflexión muy fuerte y describió cómo es el lazo actual con Dolores. Una concepción peculiar, que invita a pensar en cómo fueron los términos en que concluyeron el matrimonio.

Con mucha honestidad, Matías bramó: “No somos amigos con Dolores (Barreiro), somos padres de nuestros hijos, los dos estamos en pareja cada uno por su lado y estamos muy bien así“. Tajante, directa, sin vueltas ni tapujos.

A la hora de profundizar en los estímulos que lo motorizan a esa lejanía con su ex, el músico explicó que pondera su presente con otra mujer. “Estuvimos casados 22 años y tuvimos cinco hijos, y me doy cuenta que por proteger a mi pareja prefiero tener una relación distante”, exteriorizó.

En lo referido a los acuerdos en la crianza conjunta de los pequeños, Matías narró: “Mis hijos viven en su casa con su madre, los más chiquitos vienen los fines de semana y con los más grandes… tienen sus planes, pero nos vemos”.