Definitivo: cómo deberán liquidar la AFA y los jugadores los U$S 52 millones por ser campeones
La normativa cambiaria, que todos los días perjudica a los exportadores con un tipo de cambio oficial, más bajo que los financieros, ahora alcanza a los campeones del mundo y la Asociación del Fútbol Argentino. Todos los detalles de cómo deberá hacerse la liquidación.
La Asociación de Fútbol Argentino (AFA), Lionel Messi, Lionel Scaloni y el resto de los campeones del mundo que lograron levantar la Copa el domingo pasado en Doha, están, en términos económicos, contables y cambiarios, en manos del Gobierno. Concretamente, del Banco Central de la República Argentina (BCRA).
La entidad que maneja Miguel Pesce ya tiene definido el tratamiento fiscal que le dará al premio de 52 millones de dólares que el seleccionado argentino ganó, por haberse coronado campeón en el estadio Lusail el 18 de diciembre; dinero dividido en los 42 millones de dólares que pagará al triunfador de la final contra Francia la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) y otros 10 millones extras que aportará la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).
En total, serán U$S 52 millones y el gran tema hacia adelante, cuando los festejos ya hayan concluido, es el tratamiento que tendrá ese dinero para poder quedar como operativo tanto para la AFA como para los jugadores y cuerpo técnico.
La decisión de la entidad está definida: esos millones de dólares serán tomados como una exportación de servicios proveniente de una entidad sin fines de lucro, como es la AFA, y los jugadores recibirán su premio tal cual lo estipulado como actividad profesional.
Esto quiere decir que el dinero no será considerado como un "premio", lo que hubiera cambiado la consideración contable y fiscal del tratamiento contable; lo que hubiera derivado en que la carga impositiva hubiera sido sensiblemente menor.
La decisión del BCRA es que los US$ 52 millones que recibirán la AFA, los jugadores y el cuerpo técnico serán tomados como una exportación de servicios, proveniente de una entidad sin fines de lucro y los jugadores recibirán su premio tal cual lo estipulado como actividad profesional.
La mano del Estado
Técnicamente, el BCRA aplicará la siguiente resolución, con el aval del resto del Gobierno. La entidad que dirige Claudio Fabián "Chiqui" Tapia debe declarar, ingresar y liquidar el dinero, una vez que desde la FIFA y la CONMEBOL se les ejecute el pago final, la que seguramente se realizará a través de un depósito en alguna cuenta bancaria que la propia AFA tenga en el exterior.
Se supone que el país donde se realizará esta operación (junto con la de la entidad sudamericana) será en Suiza, donde la FIFA tiene su sede. Si por alguna razón, la AFA no informa que se depositó el dinero, puede ser pasible de las mismas sanciones que cualquier otro exportador. Y, por el monto, acusado eventualmente bajo las garras de la ley penal tributaria.
Una vez informado el depósito por parte de la AFA, el BCRA le informará la cantidad de tiempo máximo para realizar la liquidación. Lo cierto es que en días posteriores al giro de la FIFA y la CONMEBOL, los 52 millones de dólares deberán ser girados al país y liquidados en pesos al dólar oficial. Sin excepción.
La norma que aplicará el Central es implacable y está avalada, tanto por las normas contables y fiscales internacionales, como por el propio Fondo Monetario Internacional (FMI). Esto implica también que las auditoras mundiales deben tomarlas como absolutamente válidas.
La reglamentación que se aplicará figura en las regulaciones internas bajo el código S24, e implica que los premios que cobra la AFA son servicios, recreativos y culturales; los que, según el BCRA tienen obligación de ingreso y liquidación. En definitiva, definición internacional más regulación interna, da la obligación de ingreso y liquidación.
La operación cambiaria, si se concretara hoy, sería la siguiente. Los 52 millones de dólares se venderían en el Mercado Unico y Libre de Cambios (MULC) a un valor de 180,64 pesos, lo que implicaría que, aproximadamente, la AFA recibirá en sus cuentas unos $ 9.360.000.000 millones.
Si, por el contrario, pudiera liquidarlo con la consideración de "premio" y no como "exportación de servicio", podría recurrir al mercado financiero (CCL); con lo que recibiría unos $ 17.264.000.000 millones. Perdería entonces unos 7.904.000.000 millones de pesos.
La ventaja para la entidad, es que al ser una organización sin fines de lucro, no debe pagar impuestos ni tributos nacionales. Como está radicada en Capital Federal, tampoco locales. Con lo cual el dinero que recibirá la AFA, en pesos, quedará neto. Sin embargo, por la propia esencia de la AFA, todo el dinero que le quede posterior al pago de costos y premios a los jugadores y cuerpo técnico (ya hablaremos de ello), tendrá que reinvertirlo. O guardarlo en cuentas en pesos en cualquier entidad financiera argentina.
Pero no pueden ser consideradas ganancias ni redistribuirla en los socios de la AFA (los clubes de fútbol). Según la promesa que alguna vez hizo el "Chiqui" Tapia, el dinero se destinará a fomentar el futbol en el interior y a mejorar el predio de Ezeiza.
Ricos y famosos
Los jugadores y cuerpo técnico campeones del mundo tienen una posición mucho más cómoda que la AFA. Al menos en cuanto al acceso a los dólares. Nadie conoce en profundidad el contrato (o contratos) que Messi, Ángel Di María y compañía tienen con la AFA. Ni si hay diferentes tratamientos según jugador.
Pero lo cierto es que si el contrato firmado por las partes es en divisas (se supone que así es), y como la mayoría de los jugadores tiene residencia fiscal en el exterior por estar contratados por clubes extranjeros; tienen la libertad de exigir el pago pactado se realice en cualquier entidad financiera radicada fuera del país.
Si así figurara en lo firmado entre la AFA y los jugadores, éstos podrían exigir que se les transfiera el monto por el trabajo realizado, más el premio pactado a alguna cuenta radicada fuera del país; donde la persona beneficiada (el player) tenga radicada su pertenencia contable.
Luego, el jugador, deberá ver con el fisco de ese país el tratamiento del dinero. Hay sistemas fiscales que mencionan que un premio no tiene por qué pagar impuestos (Inglaterra) y otros que sí (Francia). Volviendo a la Argentina, y por ser residentes fuera del país, los campeones del mundo pueden acceder a los dólares pactados al precio oficial.
Es la AFA la que tendrá que pedir las divisas para hacer el giro, ya que originalmente la AFA debió cambiar los US$ 52 millones recibidos como premio. La entidad aclarará que requiere las divisas para pagarle a Messi, Di María y el resto de los campeones (incluyendo al cuerpo técnico de Lionel Scaloni) y el BCRA dispondrá de las divisas al precio oficial para que la entidad cuente con las divisas, que luego podrá girar libremente al exterior.
Los jugadores podrían, si quisieran, liquidar esos dólares en el mercado financiero, obteniendo pesos al precio del CCL y casi duplicando lo que recibiría la AFA.
Obviamente, para que esto funcione, la entidad que regula el fútbol argentino deberá mostrar los contratos documentados con los jugadores y el cuerpo técnico bajo la figura de "prestación del servicio". Luego podrá pagar en dólares oficiales, siempre que no sean residentes en Argentina. Algo que se descarta que es así. Hay una duda en el listado. El único que trabaja en el país es el arquero suplente Franco Armani, quién juega en el Club Atlético River Plate, y, en consecuencia, es obligatoriamente residente fiscal local. Se daría que el ídolo de este club sea el único que cobre en pesos al tipo de cambio oficial.