Guaymallén

Piden elevación a juicio para hermanos acusados de matar en un "duelo"

Los "Cotelita" ya eran conocidos antes de enfrentarse con Luciano Sosa. Ahora Sosa está muerto y la fiscal Claudia Ríos pidió la elevación a juicio para juzgar a los dos hermanos sospechados de haberle disparado.

Facundo García
Facundo García jueves, 11 de junio de 2020 · 16:33 hs
Piden elevación a juicio para hermanos acusados de matar en un "duelo"
Muy joven Agustín Cotela tiene problemas con la ley a pesar de su juventud.

Los hermanos Agustín (18) y Cristian (20) Cotela están presos desde antes de la pandemia, acusados de haber saldado una pelea matando a Luciano Fabián Sosa (26). Ahora se acerca el momento del juicio y habrá que ver cómo hacen para demostrar -en contra de numerosas pruebas- que ellos no tuvieron que ver con ese asesinato.

A pesar de su juventud, los Cotelita son viejos conocidos en algunas zonas de Guaymallén, pero también en la Triple Frontera de Maipú, Luján y Godoy Cruz. Venían derrapando en distintos hechos, hasta que llegó la muerte de Sosa, que parece marcar un antes y un después en sus prontuarios.

Y aunque la defensa viene reclamando la domiciliaria, el juez Juan Manuel Pina les dictó la preventiva tiempo atrás y recibió esta semana el pedido de elevación a juicio por parte de la fiscal Claudia Ríos Ortíz, quien además solicitó una prórroga de 3 meses para ultimar detalles de la investigación.

Cristian, el otro Cotela.

El desafío

Todo comenzó el 8 de marzo pasado. Cerca de las seis de la madrugada, los Cotelita habrían tenido una fuerte discusión con Sosa en la puerta de la casa donde vivía este último. 

—Hagamos una cosa. Venite a la plaza y la seguimos— le habrían dicho los hermanos.

Entonces Sosa asistió al lugar pautado: acaso para darse ánimos, llevaba algunos ravioles de cocaína entre sus prendas. Una vez en la Plaza del barrio Nebot, le pegaron dos tiros, uno en el pecho y otro en el cuello, por lo que perdió la vida.

En la secuencia, uno de los hermanos Cotela recibió un balazo en la mano. Llamó al 911 para pedir asistencia, alegando que lo habían herido en un asalto. Pero al rato se comprobó que no se trataba de un robo, sino de un caso muy diferente.

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