La historia del elefante Tamy: 40 años encerrado en una fosa, solo y sin cuidados
El elefante Tamy murió en el Ecoparque de Mendoza a los 55 años. Vivió 15 en un circo y 40 en el zoológico. Triste historia de cautiverio y abandono.
El elefante Tamy viviendo en cautiverio.
Fundación Franz WeberEl elefante Tamy murió hoy a los 55 años y puso otra vez sobre la mesa la triste historia de cautiverio y abandono a la que fue sometido durante toda su vida el animal asiático. Lamentablemente no tuvo un final feliz como el tortugo Jorge que logró rehabilitarse y volver al mar.
Tamy llegó al por entonces zoológico de Mendoza en 1984 tras ser donado por el Circo Hermanas Gasca que no consiguió los permisos para llevar al elefante a Chile. En los 15 años que vivió con el circo fue sometido a un entrenamiento violento y desconfiaba de las personas. Según algunas versiones Tamy mató a uno de sus cuidadores.
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El elefante vivió solo en una fosa
Cuando llegó al zoológico, el elefante Tamy fue colocado en una fosa bajo el concepto que tenían los zoológicos en ese momento: para entretener y darle la oportunidad al público de ver una animal exótico.
No tenía espacio para caminar, ni agua, ni árboles, ni arbustos. Solo había cemento y paredes. Se pasaba las horas contra la pared.
En el recinto contiguo vivían Pocha y Guillermina. Cuando ellas fueron trasladadas al santuario para elefantes en Brasil en 2022, las autoridades del Ecoparque ampliaron el recinto de Tamy y así logró tener una pequeña laguna y espacio para caminar.
El difícil entrenamiento del elefante
Con el antecedente de un cuidador muerto, el personal del Ecoparque temía al elefante Tamy por lo que durante el tiempo que vivió en Mendoza no logró hacer lazos con ninguna persona.
El no confiaba en los humanos y los cuidadores no confiaban en el elefante. La relación se limitaba a darle de comer y limpiar en algunos momentos el recinto.
Durante 38 años, Tamy nunca fue examinado, no se le hicieron estudios de sangre, no se le hizo el mantenimiento de sus patas ni se le lavó nunca la trompa.
Por qué no trasladaron al elefante Tamy
Aunque en un principio el traslado de Tamy estaba planeado diciembre de 2024, el año pasado el gobernador Alfredo Cornejo aprobó una adenda al acuerdo marco firmado por la Secretaría de Ambiente y Ordenamiento Territorial, la Dirección Ecoparque y el Santuario de Elefantes Brasil fijando como nueva fecha límite de traslado del elefante el 31 de diciembre de 2027.
Había un problema central para poder llevar a Tamy a Brasil: hacerle los estudios y lograr que entrara a la jaula que lo iba a llevar a Mato Grosso. Como no confiaba en las personas era muy importante entrenar al elefante.
Esta tarea, el Gobierno de Mendoza se la encomendó al experto especializado en elefantes, Ingo Schmidinger, que en pocas semanas logró avances positivos en Tamy pero no los suficientes como para decidir trasladarlo.
“Tamy estaba en su recinto y no podía hacer nada. No tenía ni ramas, ni riachuelos, ni arena, ni nada”, dijo Ingo cuando conoció a Tamy.
El entrenamiento inicial se hizo con una puerta especial con los especialistas de un lado y elefante del otro para evitar accidentes. “Lo entrenamos con refuerzos positivos. Tamy quiere ser cariñoso pero no sabe como tener un comportamiento normal”, cerró.
Muerte en cautiverio
Después de vivir 15 años en un circo -sometido a los duros adiestramientos de los entrenadores- y 40 años en cautiverio en el zoológico de Mendoza, Tamy murió a los 55 años. En los próximos días se conocerán los detalles de la autopsia y se sabrá la causa de la muerte del elefante.
Solo los dos últimos años de su vida, Tamy experimentó una relación con los cuidadores, salió de su vida de aburrimiento y monotonía, y alcanzó algunos pequeños avances con el entrenamiento especializado.
Las fotos de Tamy
