Científicos del CONICET capturaron dos yaguaretés para estudiarlos y lo que encontraron fue llamativo

Investigadores del Instituto de Biología Subtropical, nucleados en el Proyecto Yaguareté (CeIBA-CONICET), capturaron a dos yaguaretés, una madre y su cría, para colocarles un collar satelital y así poder rastrearlos, analizar su comportamiento y garantizar una correcta convivencia con los vecinos del área.

El hecho ocurrió en la Reserva Natural de la Defensa Puerto Península. Esta reserva, ubicada en Misiones, se encarga de conservar el hábitat de esta especie en peligro, y junto a otras áreas protegidas, resguarda a los pocos ejemplares reproductivos de yaguareté que quedan en Argentina.

En este caso, la captura de Pará, la madre, y de Gaucho, como bautizaron a la cría, fue un trabajo en conjunto con la Administración de Parques Nacionales, personal del Ejército, el Projeto Onças do Iguaçu de Brasil, la Fundación We Are Wildlife y el Instituto Misionero de Biodiversidad.

Al momento de ser capturados y posteriormente liberados, además de colocarles collares rastreadores, se tomaron muestras biológicas de los animales. Durante esta toma de muestras, se comprobó que a Pará, la mamá de 6 años, le faltaba un ojo, tenía una lesión en el hocico y presentaba perdigones de arma de fuego alojados en su cuerpo. Esto confirma que la cacería constituye una de las mayores amenazas para la especie en la región.

Convivencia de los yaguaretés y los vecinos

Una de las principales razones por las que se les colocó el collar fue para predecir las áreas de posible interacción con animales domésticos. Según reportaron algunos vecinos, este ha sido uno de los problemas en la zona, ya que desde hace algunos meses, en la zona de las 2000 hectáreas, cerca de Puerto Iguazú, se reportaron desapariciones y ataques a perros.