Terror en Ecuador: el crudo relato de una familia en medio del caos
Una joven oriunda de Guayaquil revela en primera persona cómo atraviesa la crisis social junto a su familia.
El terror crece en Ecuador, luego de que un grupo de encapuchados armados ingresara al estudio del canal televisivo TC para someter, en vivo, a los periodistas y productores presentes. Paralelamente, el caos se multiplicaba con saqueos en los supermercados y secuestros en las universidades de Guayaquil, ciudad ubicada al suroeste de Ecuador.
Así tomaban el canal de televisión en Ecuador
En medio de la crisis de seguridad más grande de la historia de Ecuador, el presidente, Daniel Noboa, identificó al estallido como un "conflicto armado interno". En consecuencia, el mandatario habilitó a las Fuerzas Armadas a "ejecutar operaciones militares, bajo el derecho internacional humanitario y respetando los derechos humanos".
Como medida para resguardar la seguridad de los ciudadanos, el gobierno de Noboa suspendió las clases en colegios y universidades. Lo mismo se replica para el servicio de transporte público, que dejará de funcionar hasta que cese el estado de conflicto interno armado.
Mira el video del ataque a las ciudades
Así viven los ciudadanos comunes el ataque narco
A pesar de que los ataques, que se relacionan con el narcotráfico, se dieron en la tarde, los ciudadanos de Guayaquil ya sentían el temor en la mañana. Una joven, que pide que no se revele su nombre por seguridad, confesó: “Hoy nos levantamos con noticias de bombas en diferentes partes de la ciudad de Guayaquil y otras partes del país”.
“Fue algo que nos sorprendió a todos que se metieran al canal de TC televisión. Igual, ya nos hemos acostumbrado a escuchar de bombas y de muertes todos los días. Ya no sabemos qué más podemos esperar con estos delincuentes”, señaló la estudiante ecuatoriana.
Mira el video de los saqueos
La joven, que se encuentra resguardada en su hogar junto a su familia, aseguró sentir mucho miedo y desesperación. Temen salir y no saber si regresen sanos y salvos a casa. “En la esquina de la casa puede ser que nos maten, ya vivimos el día a día. Vivimos el terror del narcotráfico”, reconoció.
“La verdad que ni en casa estamos seguros. Los delincuentes se pueden meter a casa. Solo le pedimos a Dios que todo esto acabe”, anheló la joven oriunda de Guayaquil.