Bioquímicos analizan volver a cobrar un coseguro y advierten sobre “el deterioro en salud”
Desde el sector aseguraron que los pacientes ya no se realizan controles debido a los altos costos que se deben afrontar y alertaron: "Estamos llegando tarde"
“Las personas están evitando hacerse chequeos médicos preventivos y solo van al médico cuando ya se sienten mal. Esto es muy preocupante y un grave problema de salud pública”, la advertencia la hizo Gustavo Yapur, presidente de la Asociación Bioquímica de Mendoza, cuyo sector nuevamente se encuentra sorteando inconvenientes con las obras sociales y prepagas. Esta situación los ha llevado a analizar el retorno del pago de compensaciones a los afiliados de empresas que no paguen en tiempo y forma.
Hace pocos días, los laboratorios debieron afrontar otro conflicto que también alcanzó a quienes requerían de estudios para alcanzar un diagnóstico. Es que, antes de la importante devaluación que aplicó la gestión de Javier Milei, no estaban ingresando algunos reactivos. “No sabemos si fue porque el dólar estaba muy bajo o si el problema fue que los importadores no estaban consiguiendo dólares para hacer la transacción. Lo cierto es que tuvimos un faltantes importante de reactivos, sobre todo para aquellos estudios de alta complejidad, hormonales o para detectar enfermedades inmunológicas”, detalló Yapur.
La falta de insumos había provocado que, quienes requerían de este tipo de estudios, debiesen consultar en varios lugares o someterse a una extracción de sangre y permitir que la muestra fuese almacenada hasta poder analizarla.
Nuevos problemas
Al retornar el flujo de insumos, los bioquímicos se encontraron con estrepitosos aumentos y el anuncio de que, el próximo mes, se aplicaran nuevas subas. Es que, en gran medida, los materiales imprescindibles para su actividad son importados.
Pero, la dificultad mayor con la que deben lidiar desde el sector es que el encarecimiento de los costos debe afrontarse con retornos que muchas obras sociales y prepagas realizan a 60 o 90 días. “Actualmente, lo que nos pagan las obras sociales ha quedado muy rezagado. Los valores de los materiales descartables se han ido a más del doble y, aunque se nos ha incrementado en proporción a las últimas subas que han aplicado, esto no alcanza. A esto se le suma la demora en el pago. Por ejemplo, un examen que yo realice hoy, lo cobraré en abril”, señaló el profesional para visibilizar que la inflación licúa por completo sus ingresos.
Esta situación los ha hecho analizar el cobro de un coseguro o compensación a los afiliados de las empresas de medicina que no estén haciendo los pagos en tiempo y forma. “No se trata de todas, el mayor problema lo tenemos con las más chicas. Ahora le hemos dado un ultimátum para que mejoren sus plazos. De no hacerlo, deberemos cobrarle al afiliado”, explicó.
PAMI y OSEP: conflictos en puerta
La obra social que nuclea a los empleados públicos de toda la provincia vive, desde hace años una de las crisis más profundas de su historia y esto repercute en todo el ámbito de la salud. Yapur comentó que se encuentran manteniendo reuniones con las autoridades de OSEP casi a diario y es que es preocupante el arancel cada vez más alto que debe afrontar el afiliado al realizarse exámenes.
Sobre esta situación, el profesional indicó: “Dicen que no tienen recursos para afrontar este gasto, pero es un falso ahorro lo que hacen porque, en sus propios efectores ellos no van a poder darle respuesta a todos los afiliados. Además, si se incrementa la cantidad de pacientes que asisten a sus laboratorios, también van a tener que reponer insumos más a menudo. Es decir, el gasto será el mismo, pero el agravante es que, con estas medidas, se afecta aún más a los afiliados”.
Respecto a PAMI, Yapur confesó que, desde que asumió la nueva gestión, se han pedido varias audiencias y no han obtenido respuestas por el momento. Esto ha provocado preocupación en el sector y puede traer repercusiones a largo plazo. Principalmente porque la obra social de jubilados y pensionados está pagando a muy bajo costo las prestaciones y, sin miras la posibilidad de nuevas negociaciones, una de las posibilidades que se están discutiendo es aplicar un sistema de cupos.
Un problema de salud pública
El contexto que se está presentando y los cambios que se aplicaron o se discuten en el Congreso respecto a la salud son vistos con preocupación. Yapur asegura que, en los últimos dos años, el comportamiento de la población se ha modificado respecto a los cuidados en materia de salud, sobre todo en lo que respecta a la prevención.
“No hacer foco en la prevención es un error y una falsa idea de ahorro porque, con un análisis que cuesta unos pocos pesos y una medicina mucho más económica se puede llegar a prevenir tratamientos como la diálisis, con un costo millonario, y hasta un trasplante”, expresa y suma respecto a lo que a diario se observa: “Hay una merma importante en la concurrencia de los de los pacientes a los laboratorios. Esto es preocupante. No por una cuestión comercial o económica del sector de los laboratorios sino porque la salud se está deteriorando”.
Esta actitud de la población se extiende a todo el sector de la salud, según explica, ya que los pacientes optan por evitar las revisiones y repetir recetas –en caso de patologías crónicas- aunque la dosis ya no sea la correcta. “También es entendible, nos pasa a todos. Vas al médico y te cobra, vas a laboratorio y te cobra, vas a la farmacia y es cada vez más caro. Pero esto hace que estemos llegando tarde y es preocupante. Los pacientes solo están yendo al médico cuando realmente están enfermos”, advirtió con preocupación Yapur.

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