Provincias en alerta por las inundaciones en el Litoral: siguen aumentando los afectados
La amenaza persiste en el Litoral porque las lluvias no cesan sobre la Cuenca del Plata y el caudal de los ríos sigue creciendo.
Crece la preocupación por la creciente de los ríos Paraná y Uruguay en la Mesopotamia argentina, y evacuan campos y ciudades por las posibles inundaciones. Los gobiernos provinciales, municipales y de la Nación coordinan planes de asistencia humanitaria para los evacuados y aquellos que se vean afectados ante la extraordinaria situación climática.
Además de las lluvias en Brasil y el norte de Misiones, la apertura de emergencia de las represas Itaipú y Yacyretá colaboraron con el aumento del caudal de los ríos Paraná y Uruguay que, en distintas provincias, tienen una gran cantidad de habitantes en la ribera. Ante esto se teme por inundaciones de gravedad, dadas las proyecciones realizadas por el Instituto Nacional del Agua (INA) ante las precipitaciones ocurridas río arriba.
Luego del cierre del Parque Nacional Iguazú por cuestiones de seguridad, ya reabierto pero con limitaciones, el caudal llegó al norte y este de la provincia de Corrientes, empujando a cientos de familias fuera de sus hogares. Además, varios productores ganaderos debieron arriar sus animales por terrenos anegados afín de rescatarlos ante posibles infecciones y falta de alimento que generan las inundaciones.
Por la crisis hídrica, Misiones quedó aislada y se cortaron puentes, como el que une Eldorado con Montecarlo, ambas localidades de la provincia que limita con Brasil y Paraguay. Por este corte se dificulta el acceso a Posadas, capital provincial, obligando a realizar más de 200 kilómetros de desvío para llegar a ella.
En el norte de Santa Fe y el oeste de Corrientes también comenzaron a prepararse por aumento del caudal del río Paraná, como también en las ciudades occidentales de Entre Ríos. Con un pronóstico poco alentador para el norte de la Cuenca del Plata y la continuidad de las precipitaciones, esperan que la próxima semana empiece a verse el pico de la creciente.
En Corrientes, durante la recorrida del gobernador provincial Gustavo Valdés, la ministra de Desarrollo Social de la Nación, Victoria Tolosa Paz, se comunicó vía telefónica con el mandatario provincial para coordinar operativos de forma conjunta. "Estamos mirando muy de cerca lo que viene pasando con la crecida del Río Uruguay hace unos días y ahora con la del Paraná. Y por supuesto estamos acá para asistir durante el fin de semana a las familias que necesitan de la contención del Estado Nacional", indicó la funcionaria nacional.
"Estamos preparados y los equipos de emergencia articulamos entre Nación, provincia y municipios para que todo pueda ser un poquito menos grave y más leve para las familias, porque sabemos que cuando entra el agua se pierde mucho" añadió Tolosa Paz. En las últimas horas del viernes, se enviaron diez camiones a Corrientes con 15.000 kilos de alimentos y agua potable, además de abrigo, materiales, productos de higiene y equipos de trabajadores sociales.
Según informaron desde el INA, los cálculos apuntan a que en Reconquista, uno de los principales núcleos ganaderos de la región, el agua alcance los 5,85 metros para el 11 de noviembre. En la Ciudad de Santa Fe, según estimaciones del mismo instituto, el agua podrá alcanzar los 5,10 metros entre el 15 y el 20 de este mes, solo 20 centímetros menos del nivel de alerta.
En Entre Ríos, el alerta incluye a más localidades por las grandes concentraciones que hay sobre la ribera de ambos ríos, destacando la ciudad de Paraná y La Paz, al oeste, y las de Concordia, Colón, Concepción del Uruguay y Gualeguaychú, estas últimas cuatro en el oriente provincial. Desde el Gobierno de la provincia ya se orquestó un plan de contingencia para paliar los daños que pudieran generar las inundaciones, trabajando de forma conjunta con las municipalidades para la evacuación y la distribución de mercadería.