“Il divino Raffaello”, controversias en torno a un hallazgo
Nuestro consultor de arte, Carlos Pinasco expone importantes obras este domingo en MDZ.
Desde hace algunos meses la prensa internacional (y alguna local) ha especulado con el descubrimiento de una obra, hasta ahora ignota, de Rafael Sanzio (1483-1520) miembro, junto a Leonardo y Miguel Ángel de la gloriosa trinidad pictórica del Primer Renacimiento. Al inicio una revista científica y luego algunos “expertos” reunidos en una conferencia internacional en Italia, anunciaron recientemente el descubrimiento de una pintura sobre tabla de 46 x 34 centímetros representando a María Magdalena, de autoría de autoría de Rafael.
La modelo que posa para la obra sería Chiara Fancelli, la esposa del Perugino, maestro de “il divino”. La obra pertenece a una colección privada que por ahora no se identifica. Imposible no relacionar el caso al del supuesto da Vinci “Salvator Mundi” que oportunamente comentamos.
Existe una versión de un retrato de la Magdalena realizado por Il Perugino (Piero Vanucci, 1446-1523) en la Galería Palatina del Palazzo Pitti de Florencia y otra en Vila Borghese atribuida a su taller. Según los autores del estudio, la versión de Rafael, ahora descubierta, sería incluso anterior. La atribución al "pintor divino" se basa, entre otras cosas, en la utilización de la técnica del "espolvoreo" para transferir el dibujo preparatorio.
Además, la versión de Rafael sería superior desde el punto de vista estilístico y técnico, por la gracia y armonía de la composición y por el uso de matices que resalta la influencia de Leonardo da Vinci en el joven pintor de Urbino. Finalmente, el estudio también analiza las proporciones matemáticas utilizadas por Rafael.
En la vereda de enfrente, Vittorio Sgarbi, historiador del arte y subsecretario de Cultura, considera imposible la noticia del descubrimiento de un supuesto Rafael. “No hay posibilidad que el cuadro anunciado como Rafael, sea del maestro de Urbino. Es sólo una primicia periodística, ya que se basa en el conocimiento de unos pocos al tratarse de una obra de una colección privada, con la legítima aspiración de su propietario de poseer un Rafael".
“La idea de una Magdalena con el aspecto de la esposa de Perugino ya es extraña – añade Sgarbi –. La obra anunciada como de Rafael – afirma – es en realidad una versión, quizás autógrafa, del Perugino conservado en el Palacio Pitti, del que se conoce otra versión en la Galería Borghese.
Es difícil qué en 1504, cuando, a diferencia de su Maestro en las “Las bodas de la Virgen en Caná”, Rafael, con infinita gracia, pintara su admirable "Las bodas", ahora en Brera, mucho más libre, nueva y más suelta que la del maestro, se dedicara a hacer una copia de Perugino, que en ese momento ya ha dejado atrás. E igualmente imposible – subraya – es que Perugino haya pintado una copia de Rafael. Por tanto, la nueva versión, procedente de una colección privada, es a lo sumo una réplica del Perugino. Cuya autenticidad debe ser verificada, comparada con la determinada de las obras conservadas en museos, y en el dominio público".
Vincenzo Farinella, historiador del arte y profesor titular de Historia del Arte Moderno en la Universidad de Pisa, comparte la misma opinión en declaraciones: "Podría tratarse de una nueva versión de la Maddalena de Perugino, de la que existen numerosas copias. La hipótesis de que podría ser obra de Rafael no parece sostenerse"
Adhiriendo a estas últimas opiniones. A mi entender, se trata de una nueva operación de “puesta en valor” de un hallazgo importante. No sería de extrañar una próxima exhibición pública de la obra, en algún museo (seguramente catalogada cómo atribuida a Rafael) y luego una venta privada o la aparición en la tarima de una de las subastadoras más prestigiosas.
* Carlos María Pinasco es consultor de arte.
carlosmpinasco@gmail.com