Boom turístico: con cuánta gente se llenan todos hoteles en el país

Con la temporada de verano a pleno, desde distintos sectores se habla del boom turístico como una señal de la recuperación económica. Es cierto que si se compara con el ciclo estival anterior, entre fines del 2021 y comienzos del 2022, los números son todos positivos.

El factor a tener en cuenta en este caso es que, en aquel momento, la actividad estaba afectada todavía por algunas restricciones sanitarias por la pandemia. Por ejemplo, era muy baja la llegada de turistas del exterior o, incluso, de argentinos radicados en otros países que regresaron para reencontrarse con sus familiares.

Hoy los destinos turísticos trabajan con total normalidad y la medición del caudal de gente no tiene alteraciones.

Uno de los datos que se le da mayor importancia para reflejar el nivel de actividad es la ocupación hotelera. Según los datos que se informan desde distintas provincias y cámaras sectoriales la capacidad ocupada ronda el 80%. En las plazas más codiciadas puede llegar a haber ocupación completa, especialmente los fines de semana. Este es un fenómeno que se produce, por ejemplo, en la costa atlántica. 

Los últimos datos oficiales que se tienen registro, según informaron a MDZ desde la Cámara de Hoteles de la República Argentina, hay en el país 441.446 plazas distribuidas en unos 5.900 establecimientos de las distintas categorías.

Es decir, las camas disponibles alcanzan a ese número de pasajeros, más allá de cómo se repartan en habitaciones para una, dos, tres, cuatro personas o más. Las más demandadas son las habitaciones dobles o triples.

Cuando se habla de ocupación hotelera plena se refiere, entonces, a que hay como máximo unas 441.446 personas alojadas. En caso de tratarse del 80%, el número rondaría las 350.000.

Si, por ejemplo, en todos los casos, se tratase de un matrimonio con sólo un hijo, esa capacidad hotelera de un día se ocuparía con poco más de 100.000 familias. 

El otro dato tener en cuenta es la cantidad de días que se queda alojada cada persona o grupo familiar y la forma de rotación. Puede ser, por ejemplo, que la misma persona se aloje en un hotel en distintos momentos del verano. Eso es común para los que hacen turismo de fin de semana.

La estadía promedio varía según los lugares. Por ejemplo, en Cataratas de Iguazú ronda los tres días, en la Ciudad de Buenos Aires es de 1,7 días. En la costa atlántica se extiende a cinco días. Un número similar se encuentra en algunos destinos de la Patagonia. 

No es que se necesitan todos los días 441.446 personas nuevas para colmar los hoteles, sino que son las mismas que se quedan varios días o van rotando. 

El dato sirve para tomar magnitud de la cantidad de gente que ocupa por día los hoteles en un país de 47 millones de habitantes: menos del 1% de la población.

A este porcentaje hay que quitarle los turistas extranjeros. Este dato varía muchos según los destinos y la categoría de los establecimientos. En las plazas más demandadas por los viajeros internacionales, los hoteles de mayor categoría o “boutique” pueden llegar a 60% el número de extranjeros.

En CABA, la participación histórica en la alta gama rondaba el 70%. Hoy, de a poco, va mejorando y se ubica en 25%. Por eso, esas 441.446 plazas totales se tienen que compartir con un turismo extranjero que va en aumento.

Hay que aclarar que ese número se refiere a hoteles y no incluye otro tipo de alojamiento como los alquileres temporarios o tradicionales.