El día que el rey Carlos III visitó Argentina y homenajeó a los caídos en Malvinas
El entonces príncipe Carlos visitó Argentina a fines de los noventa, durante el ocaso del gobierno menemista, para recomponer las relaciones entre ambos países tras la Guerra de Malvinas de 1982.
Hace ya más de veinte años, el flamante rey Carlos III de Inglaterra visitó la Argentina cuando aún las heridas de la Guerra de Malvinas se mantenían abiertas en gran parte de la sociedad. En ese marco, tuvo un gesto que llamó la atención y homenajeó a los argentinos que cayeron en aquel conflicto.
Tras la muerte de la reina Isabel II, vuelve a la memoria aquella visita que realizara el entonces príncipe Carlos en 1999, cuando terminaba la presidencia de Carlos Saúl Menem.
Sin intenciones de ser utilizado políticamente, la visita de Carlos buscaba aplacar el dolor de la Guerra de Malvinas y acercar a ambos estados, que permanecían tan distanciados desde aquel conflicto. Una visita que, mas allá de las buenas intenciones, no dejaba de ser un hecho sensible para toda la población argentina.
Aquella visita también se dio entre las sospechas y durante un proceso de resignificar la imagen del heredero tras la muerte de la princesa Diana en París. En ese entonces, los asesores del príncipe de Gales se veían seriamente preocupados, también, por la imagen que pudiera tener esta visita en los malvinenses, que hasta el día de hoy mantienen una visión negativa de la Argentina. Para evitar esto último, dividieron la visita en dos, viajando el actual rey a nuestro país y al vecino Uruguay.
Aunque, por cuestiones propias de la monarquía parlamentaria que rige en el Reino Unido, el príncipe no podía entablar negociaciones ni ser un emisario de la corona, existían temores de una solicitud presidencial de visitar las islas antes de que termine su mandato. Mas aún, podía ocurrir esto, siendo Carlos Menem, el primer mandatario argentino que visitó al matrimonio real tras el conflicto bélico.
El 9 de marzo llegó el príncipe a Ezeiza y fue trasladado inmediatamente al Aeroparque Jorge Newbery de la Ciudad de Buenos Aires, donde se dio la recepción oficial. Luego de eso, como dicta el tradicional protocolo de las visitas oficiales, fue trasladado hacia el barrio de Retiro para honrar homenaje al general don José Francisco de San Martín.
Ese mismo día, se entrevistó con el presidente Carlos Menem en la Casa Rosada y, después, fue llevado al Monumento a los Caídos en Malvinas, una especie de acto central de la visita británica a nuestro país. Allí, el príncipe Carlos realizó una ceremonia similar a la que realizó Menem en la catedral de Saint Paul el año anterior.
Acompañado por el ex canciller Guido di Tella y en la presencia de la Fanfarria Alto Perú del Regimiento de Granaderos a Caballo, el actual rey Carlos III fue la pieza central del acto que se llevo adelante durante más de media hora y realizó una ofrenda floral a los caídos en la Islas Malvinas.
Al acto, asistieron agrupaciones de ex combatientes y también algunos héroes de Malvinas que fueron por su cuenta. Al terminar el acto, y tras una charla con el combatiente británico Ricky Jolly, le hicieron entrega de una carpeta que solicitaba la intervención del príncipe en la disputa diplomática por las islas: "Le solicitamos que realice gestiones favorables para que el gobierno de Gran Bretaña autorice la realización de un homenaje de veteranos de guerra argentinos y británicos en el cementerio de Darwin".
Este fue el primer gesto de la corona británica hacia los caídos en Malvinas del bando nacional. Años más tarde, en 2002, el príncipe Andrés de York, rindió homenaje a los argentinos en el Cementerio de Darwin, en las propias Islas Malvinas.