La crisis argentina impulsó un giro inesperado en los restaurantes de sushi

El paladar argentino está acostumbrado al salmón pero en el contexto que vive el país, los comerciantes deben ingeniárselas para poder vender sus productos y servicios. Los restaurantes de sushi se han visto golpeados por el aumento del dólar y el panorama incierto, teniendo que optar por recursos distintos a los que suelen usar.

El Club GastroJapo realizó un posteo el día martes 5 que llamó la atención de muchos. En la publicación, explican que ante el momento que enfrenta el país y la falta de salmón, han decidido probar con nuevas opciones. El grupo de restaurantes presentó el "Patagonia roll", hecho de trucha patagónica y el "Criollo roll" de pesca blanca nacional.

"Todo momento de crisis es una oportunidad para probar cosas nuevas, cambiar hábitos, buscar nuestras fortalezas. Por eso nuestros sushiman y sushiwoman de @clubgastojapo no se achican ante la falta de Salmón. La pesca nacional tiene tantas riquezas y ésta es tu oportunidad para poder probarlas".

Lo que explican desde las casas de sushi es que al no poder importar con el dólar oficial entonces pasa a ser con el dólar MEP o contado con liqui. Esto se ve reflejado en el precio final de este plato tan popular en la Argentina y por lo tanto, cientos de personas dejarán de comprarlo porque su valor aumentará. 

Según Marcello El del restaurante Buri Omakase y del nuevo bar Japones Kori Omakase, también socio del Club Gastro Japo, hay dos opciones en esta situación. La primera sería que los locales gastronómicos aumenten los precios de las piezas que tengan salmón, ya que tendrán que comprarlo a precios exorbitantes. 

La otra opción sería recurrir a lo que se tiene a mano, la pesca nacional. Buri Omakase dejó de trabajar hace ya 4 años con salmón, por ende, llevan años preparando otras opciones con pescados de las aguas argentinas. El problema reside -según Marcello El- en que no pueden pasarse todos los restaurantes de sushi a la pesca nacional por el simple hecho de que no hay tantos recursos.

"La alternativa directa por color, sabor y porque obviamente es más económico es la trucha. Pero bueno, para que haya trucha para todos hay que anticiparse un año. Los productores prevén un año antes la cantidad que van a vender, entonces, si todos se pasan a la trucha en cuatro semanas no hay mas trucha", explica el propietario de Buri Omalase.

La trucha, como el salmón, son pescados de criadero que deben tener su tiempo de reproducción y crecimiento, por lo que no es un proceso que pueda apurarse. Inclusive, en Tierra del Fuego se prohibió la salmonicultura por primera vez no solo en el país, sino en el mundo. Queda esperar y ver cómo continúa la situación del salmón en el resto del país.