Se disparan los alquileres y superan ampliamente la inflación

Mientras el Congreso dilata la aprobación de la nueva ley de alquileres, que aun antes de ser aprobada ya tiene detractores, los alquileres se rigen por la Ley 27.551, sancionada en junio de 2020. Esa legislación, que debía llevar transparencia al mercado inmobiliario y facilitar las negociaciones entre dueños e inquilinos, acabó poniendo trabas a las mismas dejando insatisfechos a todos los actores. Pocos meses después comenzó a debatirse la nueva ley que aun no ha sido aprobada y ya ha generado movilizaciones en contra. 

Mientras tanto, con una inflación que no cede y un sinfín de temores e incertidumbres en torno a las medidas que tomará el gobierno y que podrían impactar en los ciudadanos (tanto en dueños como inquilinos), la oferta inmobiliaria se fue modificando. Aunque cada día hay más departamentos en venta, el número de transacciones que se cierran no sube al mismo ritmo.

En los alquileres pasa algo similar: la oferta, que había subido entre marzo y agosto de 2021, comenzó entonces una pendiente que recién en junio dio señales de recuperación. Sin embargo, los precios suben cada vez más. El Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz analizó la evolución de precios de alquileres de departamentos de 1, 2 y 3 ambientes en la Ciudad de Buenos Aires. Mientras los más pequeños y los más grandes tuvieron en el último mes subas en torno al 4,5%, los de dos ambientes tuvieron aumentaron más del 16%. 

Con estos porcentajes, la suba anual de alquileres en CABA llega al 60,7%, 93,3% y 77,8%, según se trate de departamentos de uno, dos o tres ambientes. 

Según Marta Liotto, presidenta del Colegio único de corredores inmobiliarios de la Ciudad de Buenos Aires, la suba de precios tiene que ver con las reglas del mercado: menor oferta y mayor demanda. Y cree que esa realidad tiene que ver con el inconformismo que hay respecto a la Ley de alquileres vigente. "A medida que pasa el tiempo sin que se avance en la modificación de la Ley de Alquileres a los profesionales inmobiliarios se nos hace más difícil encontrar departamentos de dos y tres ambientes cuyos dueños estén dispuestos a ponerlos en alquiler".

Explica, además, que los departamentos de dos y tres ambientes son los de mayor demanda y "esto, naturalmente, hace que los precios suban".