Infraestructura escolar

Una centenaria escuela está colapsada y los alumnos siguen en clases

El colegio Martínez de Rosas de Godoy Cruz presenta graves falencias en su edificio. Aseguran que los problemas vienen de años y que los arreglos provisorios han sido tan solo un "parche". Hay techos que se llueven, problemas eléctricos, cortes de agua, caída de mampostería y baños en mal estado.

Zulema Usach
Zulema Usach jueves, 10 de marzo de 2022 · 18:38 hs
Una centenaria escuela está colapsada y los alumnos siguen en clases
Foto: Captura de pantalla
Una centenaria escuela está colapsada y los alumnos siguen en clases
Foto: Gentileza
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“Tenemos muchos problemas desde hace tiempo y la verdad es que necesitamos arreglos urgentes en la escuela. Los chicos no corren riesgo de vida porque si fuera así nosotras hubiésemos sido las primeras en pedir la suspensión de las clases”, reclama la vicedirectora de la histórica escuela Martínez de Rosas, ubicada en Godoy Cruz.

Sus dichos no son eventuales: desde que comenzó el año lectivo 2022, los 776 niños y niñas de nivel primario que asisten a la institución en ambos turnos, han vivido numerosas situaciones que exceden en sí, el aprendizaje dentro de las aulas. Es que los problemas relacionados con la infraestructura en el edificio ubicado en calle Almirante Brown son notorios y numerosos. Por ese motivo, los padres y madres de los chicos se han unido a través de las redes sociales para hacer visible su reclamo. Piden, en líneas generales, que el edificio sea adecuadamente acondicionado y reparado. Los inconvenientes, aseguran los padres, se arrastran en el colegio desde antes de la pandemia; es decir desde hace más de dos años. Y hasta ahora, las mejoras logradas por el Gobierno han sido tan solo “parches”.

A los techos de las aulas que presentan goteras, se suma que los sistemas eléctricos han quedado vetustos. Se trata de un edificio centenario en el que según coinciden las autoridades y las familias de los alumnos, no se han realizado arreglos de fondo y de mantenimiento adecuados. 

Tomar clases en condiciones extremas

En esas condiciones, las aulas de la Martínez de Rosas, se han llovido en varias oportunidades como consecuencia de las goteras que tiene una gran parte del techo. Sucedió que la membrana hace tiempo comenzó a quebrarse y la humedad hizo su parte en la antigua estructura. Los cables que forman parte de la conexión general, quedaron expuestos y por eso varias aulas quedan a oscuras cada vez que llueve.

“A la luz la arreglaron, pero el problema es que ahora falta arreglar los enchufes y por eso no podemos utilizar los ventiladores”, dice la vice. La mampostería en muy mal estado y los cortes de luz también son la prueba del nulo mantenimiento que ha sufrido el histórico colegio. "Hay muchas cosas que son arregladas de manera provisoria y que se van deteriorando; por eso queremos ayudar y colabora para poder encontrar las soluciones necesarias", asegura una mamá y detalla que los inconvenientes en el colegio vienen de hace muchos años. 

Las goteras han afectado el normal dictado de las clases en la escuela Martínez de Rosas

Para el martes 15 a las 17, en las instalaciones del edificio, las familias unidas a través de un grupo de whatsapp se han convocado en una reunión para “dar solución permanente a esta problemática”. En tanto que desde el Sindicato Único de Trabajadores de la Educación, se encuentran aún en el diseño de un relevamiento que se realizará en todas las escuelas mendocinas para conocer las necesidades puntuales de cada una. 

“Estamos viendo que la escuela desde hace varios años no tiene servicio de emergencia para los niños. En lo respectivo a la infraestructura es deplorable el estado y hasta resulta peligroso para todos los que la habitan”, dice el comunicado que llama a la comunicad educativa a sumarse.

Y continúa: “las aulas se llueven, no hay luz, no funcionan los ventiladores, hay techos que se están cayendo” alerta el comunicado y remata contando que la solución que se le está dando a esa situación es que los niños y niñas se sienten “lejos” de los lugares donde hay desprendimientos.

Los problemas en la mampostería de los techos vienen de años

Desde que las clases comenzaron en Mendoza el pasado 21 de febrero hasta la fecha, las actividades en el colegio nunca se han suspendido. “Hemos tratado de ir manejando las situaciones de la mejor manera posible para los chicos. El día que se cortó el agua nosotros les dimos a todos y les abrimos las puertas de los baños de las autoridades de manera provisoria. No han corrido ningún riesgo, a eso lo podemos asegurar, pero también pedimos de manera urgente que se hagan los arreglos necesarios porque esta situación no da para más”, repitió la vice directora y prefirió resguardar su nombre.

La sala de informática es sin dudas uno de los sectores más afectados del establecimiento. Su deterioro ha sido tal como consecuencia de la humedad en paredes y techos, que inclusive los equipos informáticos ha quedado dañados, aseguran los padres. De hecho en el video que elaboró la comunidad educativa para dar a conocer esta situación, se detalla que incluso la escuela no cuenta con conexión a Internet. 

 

 

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