Una encuesta revela el humor social de los argentinos y un dato es muy alarmante
Una consultora realizó un informe sobre el humor social de los argentinos y los datos sobre los más jóvenes son alarmantes.
La consultora Taquión realizó un informe a partir de una encuesta que revela cómo está el humor social de los argentinos, en un año que ha sido muy duro principalmente desde lo económico pero también desde lo social y político. Sofía D’Aquino, analista política y directora de la consultora, comentó los detalles del estudio.
Esta encuesta se basó en información general y particular, como vacaciones, fiestas y economía doméstica. "Nos encontramos con resultados transversales, en un contexto de pandemia y con todos los condimentos que tuvo este años: las elecciones que fueron desgastantes, la imposibilidad de viajar, las restricciones a los viajes al exterior, el covid, la cuarentena de principios de año, etc. Los argentinos atravesamos momentos muy intensos", comenzó diciendo Sofía D’Aquino.
Según reveló la encuesta, la mitad de los consultados dicen que no es momento para festejar. Y otro porcentaje similar asegura que si bien coinciden en que no es el mejor momento para celebraciones, las fiestas les sirven para liberar tensiones.
Otro dato alarmante sobre los más jóvenes es que "los centennials, aquellos que rondan los 25 años, son los más pesimistas respecto del país en general, de lo que les queda, del futuro. Vemos una situación desoladora respecto de cómo están los jóvenes hoy. Incluso a muchos les está costando dormir por estas tensiones", dijo la entrevistada en No Tan Millennials.
En cambio, "si bien hay pesimismo en líneas generales en la sociedad, en la encuesta vemos que los baby boomers -aquellos nacidos entre 1946 y 1964-, es decir los más adultos, tienen más resiliencia sobre ciertos temas y se muestran un poco más optimistas respecto de lo que le deparará a la Argentina en los próximos años".
Finalmente, sobre las fiestas, la analista dijo que en general los argentinos tenemos una actitud festiva y de celebración en diferentes situaciones, comparados con el resto del mundo. Sin embargo, "en el último tiempo, incluso antes de la pandemia, vemos que esto se empieza a romper y surge la sensación de que hay momentos de celebración y otros que hay que dejarlos para el olvido o para liberar tensiones".