Cambio climático

El océano Ártico se calienta desde principios del siglo pasado, décadas antes de lo que se pensaba

Investigadores constataron en un estudio que el océano Ártico lleva calentándose desde principios del siglo XX. Esto supone una gran amenaza para el clima mundial.

Nicolás Hornos jueves, 2 de diciembre de 2021 · 22:22 hs
El océano Ártico se calienta desde principios del siglo pasado, décadas antes de lo que se pensaba
"Cuando hablo con mis alumnos siempre intento que sean conscientes de que el Ártico se está calentando muy, muy rápidamente, y mucho más rápido que cualquier otra zona del planeta"

Un equipo internacional de investigadores reconstruyó la evolución del calentamiento del Océano Ártico y constató que sus aguas llevan calentándose desde principios del siglo pasado, varias décadas antes de lo que sugerían los registros.

El estudio publicado por la revista Science Advances titulado “Atlántificación rápida a lo largo del estrecho de Fram a principios del Siglo XX”, concluye que el Ártico se ha ido calentando debido a la entrada de agua más caliente que fluye desde océano Atlántico al océano Ártico, un fenómeno conocido como Atlantificación

Este fenómeno ha causado el aumento de la temperatura del agua del Ártico en la región estudiada en alrededor de 2°C desde 1900.

“La reciente expansión de las aguas del Atlántico hacia el Océano Ártico representa una prueba indiscutible de los rápidos cambios que se están produciendo en esta región. Comprender la variabilidad pasada de esta 'Atlántificación' es, por tanto, crucial para proporcionar una perspectiva más amplia de los cambios árticos modernos. Aquí, reconstruimos la historia de la Atlántificación a lo largo del este del Estrecho de Fram durante los últimos 800 años utilizando registros paleoceanográficos fechados con precisión basados ??en biomarcadores orgánicos y datos de foraminíferos bentónicos”, comenta el estudio.

Los autores descubrieron que el océano Ártico comenzó a calentarse rápidamente a principios del siglo XX a medida que las aguas más cálidas y saladas fluían desde el Atlántico y que este cambio probablemente empezó antes del calentamiento documentado en las últimas décadas. 

Para elaborar el estudio, los investigadores analizaron la región del Estrecho de Fram, cerca de Groenlandia y puerta de entrada al océano Ártico. Empleando datos geoquímicos y ecológicos de los sedimentos oceánicos reconstruyeron las variaciones de las propiedades del agua de los últimos 800 años, como los cambios de temperatura o salinidad.

En los primeros 800 años, los registros se mostraron constantes pero, de repente, a principios del siglo XX, se produce un cambio tan brusco que llama la atención, explicaron desde el equipo de investigación.

“Nuestros resultados muestran cambios rápidos en las propiedades de la masa de agua que comenzaron a principios del siglo XX, varias décadas antes de la Atlántificación documentada por registros instrumentales. La comparación con los registros regionales sugiere una expansión hacia los polos de las aguas subtropicales desde el final de la Pequeña Edad de Hielo en respuesta a una rápida reorganización hidrográfica en el Atlántico Norte. La comprensión de este mecanismo requerirá más investigaciones utilizando simulaciones de modelos climáticos”, expone el estudio.

Francesco Muschitiello, autor del estudio y profesor adjunto de Geografía en la Universidad de Cambridge, dijo que los resultados eran preocupantes porque el calentamiento temprano sugiere que podría haber un fallo en los modelos que los científicos utilizan para predecir cómo cambiará el clima.

Además, Muschitiello añadió que no está claro el papel que desempeñó el cambio climático de origen humano, si es que lo hizo, en el calentamiento temprano del Ártico, y que se necesita más investigación.

El calentamiento del Ártico, derrite los casco polares, aumenta el nivel del mar y se liberan gases de efecto invernadero muy dañinos

¿Debemos preocuparnos?

El estudio ofrece la primera perspectiva histórica de la atlantificación del océano Ártico y revela una conexión con el Atlántico Norte mucho más fuerte de lo que se pensaba.

Los autores advierten de que esta conexión puede influir en la variabilidad climática del Ártico y desencadenar en el retroceso del hielo marino y el aumento del nivel del mar a escala mundial a medida que las capas de hielo polar sigan derritiéndose.

Si bien todos los océanos del mundo se están calentando debido al cambio climático, el océano Ártico es el que se está calentando más rápidamente: “Más del doble de la media mundial”, resaltó Francesco Muschitiello.

A medida que el océano Ártico se calienta, el hielo polar se derrite. Esto termina produciendo que suba el nivel global del mar y se derrita el permafrost, que almacena grandes cantidades de metano, un gas de efecto invernadero mucho más dañino que el dióxido de carbono.

"Cuando hablo con mis alumnos siempre intento que sean conscientes de que el Ártico se está calentando muy, muy rápidamente, y mucho más rápido que cualquier otra zona del planeta", dijo Muschitiello y agregó: "Es muy inquietante y muy preocupante, sobre todo porque todavía no tenemos una comprensión completa de lo que está en juego. Todavía estamos conociendo poco a poco cómo funciona todo el sistema y mi temor es que para cuando descifremos el problema, será demasiado tarde".

“Las simulaciones climáticas generalmente no reproducen este tipo de calentamiento en el océano Ártico, lo que significa que hay una comprensión incompleta de los mecanismos que impulsan la atlantificación“, concluyen los investigadores.

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