La verdadera batalla detrás de la feroz interna del PRO
Denuncias e impugnaciones cruzadas entre las listas de Hebe Casado y Gabriel Pradines terminaron en la Justicia Electoral Nacional. Los escenarios posibles y cómo afecta a Cambia Mendoza.
El PRO en Mendoza tiene unos 18 mil afiliados. Hasta el año pasado eran 11 mil según los datos de la Cámara Nacional Electoral. Sin embargo, después de una ardua tarea de territorio, los distintos sectores lograron sumar casi el doble de votantes para las próximas elecciones internas que se disputarán el 2 de junio si todo corre según el calendario electoral.
El PRO es la cuarta fuerza política de Mendoza, viene después del radicalismo que nuclea unos 95 mil afiliados, le sigue el peronismo con 66 mil y en tercer lugar está el Partido Demócrata con 66 mil afiliados. Entonces, ¿por qué es tan importante esta elección interna para la política mendocina?
Para entender la interna actual hay que volver el tiempo atrás al 5 de abril del año pasado cuando la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, intervino el PRO de Mendoza cuando Omar De Marchi no quiso enfrentarse en la interna con Alfredo Cornejo y decidió lanzarse como candidato a gobernador.
Ante la posibilidad de ruptura del PRO con CM, Patricia Bullrich actuó rápidamente, sacó de la presidencia a Álvaro Martínez -el diputado nacional de confianza de Omar De Marchi- y puso a un interventor. Esta maniobra política dentro del PRO no fue gratis para el radicalismo mendocino: Hebe Casado fue ungida por el PRO nacional para ser la compañera de Alfredo Cornejo.
La fórmula de Cornejo-Casado ganó las elecciones generales en septiembre y una vez pasada la asunción llegó el momento de ordenar las filas del PRO. La vicegobernadora llamó a elecciones internas y en la Junta Electoral colocó a dos personas de su suma confianza: la secretaria legal y técnica del Senado, Nuria Olivera, y el secretario legislativo, Lucas Faure.
Desde el momento de la presentación de avales hasta la presentación de listas las impugnaciones cruzadas y las denuncias en las redes sociales enrarecieron el clima electoral. El punto más caliente se dio el viernes pasado cuando la Junta de Mendoza bajó la lista Propuesta Federal del demarchista Gabriel Pradines y quedó solo en pie la lista Amarilla encabezada por Hebe Casado. Esto desató una serie de denuncias en la Junta Electoral Nacional del PRO y en la Justicia Electoral que terminaron dejando sin efectos las resoluciones locales y volviendo el calendario al momento de la presentación de las listas para que Pradines y Casado compitan en junio.
Hebe Casado busca la concentración del poder
La vicegobernadora buscó el apoyo de Mauricio Macri antes de lanzarse a la presidencia del Pro de Mendoza. Si ella gana las elecciones de junio y se convierte en la nueva presidenta del PRO concentrará el poder del partido y será la figura más importante del PRO en Mendoza.
A la vidriera política que tiene hoy en la Legislatura sumará el control del partido y de los órganos que lo conforman como el área de jóvenes y la mesa de mujeres. Además de las estructuras en los departamentos.
Omar De Marchi quiere recuperar el partido
El secretario de Relaciones Parlamentarias y con la Sociedad Civil busca recuperar el control del Pro en Mendoza para recuperar las fuerzas que perdió después de las elecciones provinciales.
Después de la intervención del PRO, Omar de Marchi formó La Unión Mendocina y logró representación en la Legislatura. Si recupera el partido a través de Gabriel Pradines podrá poder en funcionamiento la estructura partidaria para las elecciones del año que viene y recuperar fuerzas para el 2027.
Además, si Pradines gana las elecciones tiene chances de armar una nueva coalición con La Libertad Avanza de Javier Milei, la única figura política que mantiene un alto perfil en Mendoza.
Alfredo Cornejo y la posibilidad de perder un su socio clave
Si Hebe Casado gana el 2 de junio todo sigue como está y el PRO continuará fiel al lado del radicalismo dentro de Cambia Mendoza. Por el contrario, si Gabriel Pradines gana las internas la salida del Pro de la alianza Cambia Mendoza es una carta segura.
Este segundo escenario dejaría a la UCR sin su principal socio en Mendoza y la vicegobernadora pasaría a depender totalmente de la estructura del Ejecutivo para desplegar fuerzas en la provincia.
Además, el diálogo con el PRO nacional también tendría otro interlocutor ya que pasaría de Hebe Casado a Omar De Marchi como figura local del PRO.