Los mediadores y la cumbre que buscan aplacar la crisis de la UCR y el PRO

La crisis entre la UCR y el PRO en la provincia atraviesa su punto más álgido. Los cruces entre el diputado nacional Omar De Marchi y los dirigentes radicales mendocinos cada vez son más intensos y está latente la ruptura de Cambia Mendoza, tras 8 años de alianza y a meses de iniciar un nuevo proceso electoral. En este contexto, dos intendentes buscan oficiar de mediadores para apaciguar la tensiones y recomponer relaciones, mientras que a fin de mes habrá una cumbre del frente oficialista, pero aún no está confirmada la participación de la conducción del PRO.

Las tensiones entre el exintendente de Luján y el radicalismo vienen desde hace tiempo pero en la última semana se intensificaron, luego de que el gobernador Rodolfo Suarez planteara la situación ante la mesa nacional de Juntos por el Cambio y pidiera la intervención de los referentes nacionales del PRO para que el partido no abandone la coalición a nivel local.

Ese movimiento generó enojos en la fuerza liderada por De Marchi, quien aspira a competir por la Gobernación en este 2023 y no descarta postularse encabezando un nuevo espacio por afuera de Cambia Mendoza.

Con ese meta, el vicepresidente de la Cámara de Diputados de la Nación no ha escatimado en críticas a la gestión provincial, pasando desde el proyecto de reforma de la Suprema Corte meses atrás, hasta la implementación de la Revisión Técnica Obligatoria (RTO) y la política de construcción de viviendas de forma más reciente.

Las respuestas desde el radicalismo no se han hecho esperar y en el último tiempo ha habido una escalada de cruces contra De Marchi de parte del gobernador Suarez, el senador nacional Alfredo Cornejo y el intendente de Godoy Cruz y presidente de la UCR local, Tadeo García Zalazar, además de funcionarios del gabinete provincial.

Esto ha generado que el diálogo entre el diputado y estos dirigentes esté prácticamente roto. Esta situación ha generado preocupación en dos intendentes que han estado hablando al respecto y aparecen como potenciales mediadores en el conflicto.

Se trata de los jefes comunales de Capital, Ulpiano Suarez (UCR), y de Luján, Sebastián Bragagnolo (PRO), quienes tienen una muy buena relación e incluso mantienen un contacto fluido por temas de gestión.

Desde ambos espacios políticos ven con buenos ojos que los sobrinos de Rodolfo Suarez y Omar de Marchi puedan hacer un intento para apaciguar las crecientes tensiones y recomponer las relaciones dañadas.

En el entorno de ambos intendentes reconocen que han mantenido conversaciones recientes. Resaltan que coinciden en tener un perfil conciliador y que llegado el caso pueden servir de canal para restablecer el vínculo entre la UCR y el PRO y encabezar una agenda para recomponer el Frente Cambia Mendoza.

En medio de este tenso clima, el 27 de enero a las 19 habrá una reunión de los partidos integrantes de Cambia Mendoza. La finalidad del encuentro es diagramar acciones de capacitación a fiscales acerca de la Boleta Única, debido a que en las próximas elecciones debutará esta modalidad sufragio en la provincia. Al mismo tiempo también se discutirá el calendario electoral 2023, tres días antes de que venza el plazo para que los intendentes puedan desdoblar las elecciones municipales de las provinciales.

Fuentes del PRO no garantizaron la participación de la conducción partidaria en este cónclave y manifestaron que la próxima semana tendrán una reunión para definir si asisten o no.

Vale recordar que los dirigentes del partido amarillo pegaron un faltazo a última reunión de Cambia Mendoza que tuvo lugar el 19 de diciembre. Horas antes del encuentro el presidente del PRO local, Álvaro Martínez, envió una incendiaria carta a su par radical expresando quejándose por la invitación de partidos y dirigentes que no forman parte de la coalición, a la vez que cuestionaron la falta de consulta respecto de las decisiones de gobierno.

En este sentido, un nuevo faltazo del PRO podría intensificar a un más la crisis con el radicalismo y dejar al borde de la ruptura a la alianza que nació en el 2015.