La Nación busca quitarle el manejo del agua a las provincias y Mendoza se opone

La misión oficial a Israel de la que son parte gobernadores y una comitiva del Gobierno nacional tuvo una sorpresa: la Nación busca quitarle el manejo del agua a las provincias y centralizarlo en un organismo nacional. Fue el ministro del Interior Wado de Pedro quien anunció que trabajan en un anteproyecto, y la idea alertó a algunas provincias, particularmente a Mendoza. 

La intención del Gobierno nacional es "consensuar" políticas, pero centralizar las decisiones. Esa visión se da en medio de los conflictos que tienen Mendoza y La Pampa y también el resto de las provincias que comparten cuenca en el Río Colorado. Rodolfo Suarez ya se manifestó en contra y, en realidad, le ven poco futuro a la idea. Primero, porque la Constitución Nacional le otorga a las provincias el dominio de los recursos naturales. En el caso del agua siempre ha sido así. En el caso de los recursos no renovables, como el petróleo, las provincias recuperaron el control tras duras peleas. Pero el artículo 124 de la Constitución lo menciona claramente: "Corresponde a las provincias el dominio originario de los recursos naturales existentes en su territorio", dice la Carta Magna. 

De Pedro destacó el manejo del agua que tiene Israel, donde la administración está centralizada y sus normas son "previas al Estado". Curiosamente en Mendoza ocurre algo similar: la ley de aguas es previa a la Constitución y el Departamento General de Irrigación tiene el control de la administración de ese recurso, con una organización distinta al Gobierno. Sí hubo algunos tramos de la gestión del agua que estuvieron nacionalizados. Ocurrió con Obras Sanitarias, que fue de gestión estatal. Pero en ese caso era un operador, no el "dueño" del recurso. 

Según el ministro Wado De Pedro, ya tienen un borrador que elaboraron con el Consejo Federal de Inversiones (CFI)  para centralizar la gestión del agua en todo el país. Mendoza es parte del CFI, pero hasta ahora no había novedades del tema. “La idea es generar una mesa de gobernadores para pensar sobre el proyecto, que se hagan modificaciones y presentarlo como una ley acuerdo”, dijo desde Israel el ministro. Fuentes del Gobierno nacional explicaron que en generar "hubo acuerdo" de parte de los gobernadores. Pero destacaron que Suarez sí manifestó su descontento. 

La idea nacional alerta. El agua es clave no solo por el abastecimiento sino para el desarrollo, la producción y la generación de negocios. En Mendoza el acceso a ese recurso es la enorme diferencia entre el precio vil que puede tener la tierra o la posibilidad de que esté fuertemente valorada. Además, las tensiones políticas, la gestión y el aprovechamiento para otros usos, como la generación de energía, son claves. En Mendoza es un bien escaso, pero estratégico. En otras provincias también lo es, aunque por razones distintas: en el litoral los ríos navegables son un punto estratégico. Por eso la oposición a esa idea no sería solo desde Cuyo.