Futuro jefe de la oposición

El gobernador que se resigna a perder la provincia y ya piensa en su futuro político

Omar Perotti ya sabe que el Frente de Todos tiene serias chances de ser derrotado en las elecciones locales en Santa Fe. Se viene una gestión de Juntos por el Cambio. El gobernador ya piensa en su futuro. Va a ser diputado provincial con el objetivo de presidir esa cámara.

Beto Valdez
Beto Valdez lunes, 26 de diciembre de 2022 · 19:00 hs
El gobernador que se resigna a perder la provincia y ya piensa en su futuro político

“Omar sabe que la derrota del peronismo en Santa Fe es irreversible y entonces ha decidido hacer equilibrio dentro y fuera de la provincia pensando en sobrevivir políticamente”, comenta a MDZ una fuente del PJ provincial respecto a los últimos movimientos del gobernador santafesino, Omar Perotti. Su objetivo es pagar el menor costo político por el muy probable triunfo de Juntos por el Cambio a nivel local. Y, a su vez, ser candidato a diputado provincial para intentar presidir ese cuerpo legislativo.

Envalentonado por haber sido el único político que logró fotografiarse con Leo Messi, el mandatario trata de recuperar la iniciativa política que perdió en los últimos años y que le costó una dura derrota en las elecciones de medio término de Santa Fe. Por eso viene especulando con el cronograma electoral desdoblado de los cargos locales. Su idea es muy diferente al del resto de sus colegas, quienes buscan despegarse del escenario electoral nacional. Perotti apuesta a fijar las primarias en junio y las generales en agosto muy cerca de las PASO presidenciales. Tampoco queda claro si su candidatura a diputado provincial será por el Frente de Todos o armará su propio espacio. En febrero se reúne el Congreso local del peronismo donde se debatirá la estrategia.

Perotti viene haciendo equilibrio, nunca rompió su relación política con Cristina Fernández de Kirchner y La Campora después del acuerdo interno al que llegaron para las legislativas del año pasado, comentan voceros provinciales. Paralelamente ha tomado distancias del discurso duro de los K por la condena de la vicepresidenta y optó por el silencio frente al fallo de la Corte Suprema por la coparticipación de CABA que tanto enojo al resto de los gobernadores del PJ. Busca congraciarse con el electorado más moderado de su provincia y también se alinea con su colega cordobés Juan Schiaretti.  “El Gringo sueña con armar con Omar y Sergio Bordet el peronismo de la Zona Centro", agregan las fuentes provinciales.

 

 

 

 

“Está poniendo el carro delante de los caballos, si no tenemos un candidato a gobernador relativamente competitivo, no se puede pensar en el armado del resto de las lista”, dicen sus críticos internos. Pero evidentemente el gobernador apuesta a llegar con su imagen un poco recuperada porque con el sistema de boleta única puede hacer mejor elección que el candidato a gobernador propio. Su candidatura a legislador provincial apunta a transformase en el jefe de la oposición del futuro Gobierno de JxC que puede quedar en manos de los radicales Maximiliano Pullaro o Carolina Losada. 

El objetivo de máxima es quedarse con la presidencia de la Cámara de Diputados locales. Desde ahí tendrá una caja envidiable para la política de Santa Fe y el cargo institucional lo transforma en árbitro de la futura gestión de la actual coalición opositora si es que se cumplen los pronósticos de todas las encuestas. Salvo Hermes Binner, el resto de los exgobernadores se presentaron para el mismo cargo. Primero lo hizo Antonio Bonfatti y cuatro años más tarde el fallecido Horacio Lifschitz. Se nota que ya se ha transformado en el destino ideal para quienes dejan la Casa Gris en una provincia que no tiene reelección. De todas formas, en el actual contexto el gobernador, si pudiera volver a presentarse, sería derrotado por alguno de los candidatos de JxC.

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