Los millonarios gastos del gobierno de Alberto Fernández para comprar encuestas

El gobierno de Alberto Fernández ha gastado en los últimos dos meses más de 7,6 millones de pesos solo en encuestas pedidas por distintos funcionarios para medir el 'humor social' en el marco de la campaña electoral para los comicios legislativos de noviembre próximo.

Cabe mencionar que dichas mediciones no son gastos de campaña del Frente de Todos, sino desembolsos del Ejecutivo nacional con recursos del Estado mediante la gestión de contrataciones directas a consultoras que entregan sus relevamientos a distintos ministerios y otros organismos que lo soliciten.

Según se reveló en el programa Verdad Consecuencia, del canal TN, desde el 5 de septiembre hasta el día de ayer el Gobierno nacional gastó más de 7.600.000 pesos en cinco encuestas que midieron el humor social de los argentinos en las últimas ocho semanas.

Pero esta cifra podría crecer mucho más ya que todavía quedan 133 contrataciones comprometidas en el Presupuesto que aún no se han ejecutado, por lo que el gobierno de Alberto Fernández tiene un amplio margen de maniobra económica para comprar encuestas que reflejen la evolución del humor social antes y después de las elecciones del 14 de noviembre.

Hay algunos funcionarios muy interesados en conocer los movimientos de la imagen del Gobierno. Uno de esos casos es el del ministro del Interior, Eduardo ‘Wado’ de Pedro, que encargó el 18 de octubre pasado a la consultora Julio Aurelio una encuesta que se confeccionó sobre 3.000 casos que fueron encuestados con el modelo CATI, un formulario específico de preguntas que se realiza por teléfono. Se trata del relevamiento más caro hasta ahora, ya que el Ejecutivo nacional pagó 3,2 millones de pesos.

Asimismo, el jefe de Gabinete, Juan Manzur, pidió al día siguiente otras dos encuestas a una consultora llamada Ágora bajo modalidad online e IBR (grabación), respectivamente, por lo cual terminó desembolsando un total de 1.706.250 pesos.

En tanto, la consultora Hugo Haime y Asociados hizo otra encuesta telefónica de 800 casos para la Presidencia que costó 896.000 pesos.

Aunque son números relativamente bajos en comparación con los enormes desembolsos que asume el Gobierno nacional todos los días en este contexto de crisis económica y emisión monetaria descontrolada, terminan convirtiéndose en gastos superfluos con propósitos únicamente electoralistas y que debilitan aún más las exigidas arcas del Tesoro.