Balearon un local de Antonela Roccuzzo y dejaron una amenaza para Messi

Este jueves por la mañana se descubrió que un grupo de personas baleó el frente de uno de los supermercados que tiene la familia de Antonella Roccuzzo, la esposa de Lionel Messi, en Rosario. En medio de la investigación se descubrió que dejaron una nota extorsiva en un papel, la cual estaba dirigida hacia el futbolista.

“Messi te estamos esperando. Javkin es narco, no te va a cuidar”, explicaba el papel que dejaron en la puerta del lugar. 

Las imágenes captadas por las cámaras de seguridad indicaron el hecho se produjo durante este jueves, a las 3.20 de la madrugada, y al menos dos personas se acercaron a bordo de una moto. Uno de ellos descendió del rodado y efectuó cerca de 14 disparos. 

Tras el hecho, cinco camionetas de la policía comenzaron a trabajar en el supermercado ubicado en calle Lavalle 2554, entre 27 de Febrero y Ocampo, de la ciudad de Rosario. Si bien se realizan las correspondientes pericias, información extraoficial indicó que se encontraron casquillos de bala calibre 9mm en el suelo del lugar.

Por su parte, el subjefe de la Unidad Regional II de la Policía de Rosario, Iván González, indicó que "fueron avisados por un llamado al 911". 

"Vimos impactos frente al supermercado Único. Dejaron un cartel donde habla del jugador de fútbol Messi y el intendente", explicó.

Con la amenaza narco que recibió Messi, la situación se complica aún más ya que el futbolista tiene pactado llegar a la Argentina para jugar con la Selección el 23 de marzo, frente a Panamá.

Por este hecho, se sospecha que el ataque estaría vinculado a barrabravas de la ciudad ya que hace un mes el intendente de Rosario, Pablo Javkin, cruzó públicamente al exfutbolista Miguel Ángel Russo, por haber dicho que "había jugadores que se negaban a jugar en Rosario por la inseguridad".

Según trascendió, el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, estaba viajando hacia Rosario para habar con las autoridades acerca del caso. La causa está a cargo del fiscal de Balaceras Federico Rébola, quien ordenó a la Agencia de Investigación Criminal relevar la escena.