Préstamo trucho y venta de divisas: Bento enfrenta otra indagatoria ante nuevas acusaciones

Esta semana se inaugura un importante edificio judicial en Mendoza, pero en los pasillos tribunalicios repiten que el juez Walter Bento se excusó de asistir a la apertura alegando "razones particulares". Es que hoy deberá declarar por nuevas acusaciones que se le sumaron a las que ya tenía en la causa de las coimas en la Justicia Federal; y sus palabras se añadirán a las más de 30 horas que lleva dando explicaciones en el banquillo. 

Las nuevas imputaciones, que se conocieron el 17 de septiembre, afectan tanto a Bento como a su esposa Marta Boiza y a dos sujetos que se dedicaban a la venta ilegal de divisas, Enrique de la Cruz y José María Sanguedolce. 

De la Cruz y Sanguedolce ya están en prisión domiciliaria, pero ahora deberán afrontar también un proceso por haber pagado presuntos sobornos. La hipótesis del fiscal Dante Vega es que pusieron plata para que se postergara la investigación sobre la "cueva" de cambio ilegal que regenteaban.

Entre las pruebas que sostienen esta tesis, está la "inexplicable demora" en llevar adelante acciones por parte del juez Bento. Es decir que para el fiscal, el juez había frizado el expediente mientras que la venta ilegal de dólares seguía ocurriendo. 

La otra acusación contra el juez federal tiene que ver con un préstamo del Banco de la Nación Argentina que tanto él como su esposa habrían solicitado para adquirir una "vivienda única". Se sabe, claro, que la pareja tiene una importante cantidad de bienes, y de hecho los embargos que se les aplicaron superan los 200 millones de pesos. Un raro caso de "vivienda única". 

Asimismo, se señala a Bento por haber "chapeado" con su condición de juez federal para que las autoridades bancarias le facilitaran el acceso al mencionado préstamo. Hoy se sabrá cuál es su versión de los hechos.