Caso Bento: allanamientos masivos y un acusado que cayó en Buenos Aires
Después de varios días bajo secreto de sumario, la semana comenzó con allanamientos e imputaciones. Entre los nuevos involucrados está el "Chato" Álvarez, quien habría sido uno de los facilitadores en las negociaciones con detenidos que pagaban coimas a cambio de beneficios procesales. Detalles.

La de hoy es una tarde vertiginosa para los que siguen la causa Bento. El fiscal Dante Vega pidió nuevas imputaciones contra los miembros de la organización que habría cobrado coimas en la Justicia Federal mendocina; y el juez subrogante Leopoldo Rago Gallo, de San Juan, hizo lugar a las solicitudes. Por eso la Policía detuvo en Buenos Aires a Luis Francisco "Chato" Álvarez, quien ahora está sindicado como uno de los facilitadores de los arreglos que se llevaban a cabo entre la banda criminal y diversos presos que deseaban comprar beneficios pagando en dólares.
Pero esa es sólo una parte. Mientras se escriben estas líneas, continúan los allanamientos en distintos barrios privados y escribanías de Mendoza. El expediente acumula así más imputados y al menos otra acusación por cohecho (coimas) contra el juez federal Walter Bento. Se aguarda que en el transcurso de la jornada se conozca la identidad de los nuevos implicados.

De qué lo acusan
Según las primeras informaciones, el "Chato" habría operado de forma similar a Diego Aliaga, el difunto excorredor de aduanas que -se cree- oficiaba como puntero de Bento.
En tal sentido, se sabe que Álvarez, de profesión abogado, era parte del grupo que se reunía a jugar al póker en Palmares junto a otros sujetos que figuran en la causa, por lo que no es descabellado que estuviera al tanto de los movimientos e incluso que participara en algunos. Además, su esposa es funcionaria de la Justicia Federal: resulta verosímil que accediera a datos importantes.
Todo indica que la relación entre Aliaga y Álvarez era estrecha. Al menos lo suficientemente íntima como para que, el día de su desaparición, el excorredor de aduana llegara al sitio en el que fue secuestrado manejando una camioneta BMW X6 que era propiedad del "Chato". Aliaga no volvió a conducir ese rodado porque fue hallado sin vida y enterrado semanas después en un campo de Costa de Araujo (Lavalle, Mendoza).
Por sobre esos detalles, la hipótesis del Ministerio Público -rubricada por el juez Rago Gallo- es que existía en Tribunales una organización ilícita que ofrecía beneficios procesales a cambio de pagos en dólares en el ámbito federal, que es donde se tramitan causas por contrabando, narcotráfico, secuestro, evasión fiscal y trata de personas, entre otras.

Algunos van presos, otros no
Hasta hace algunas horas, la megacausa ya sumaba 22 imputados, de los cuales se cree que Bento era el líder. Y entre los últimos cargos contra el juez está el delito de "falsedad ideológica", por haber accedido a un crédito de vivienda única del Banco Nación en 2011, cuando el magistrado tenía por lo menos tres propiedades en los vecindarios más coquetos de Mendoza.
A ello se le suma la dudosa venta de un departamento en la que Bento y su esposa, Marta Boiza, omitieron informar que él es una persona expuesta políticamente, en lo que se sospecha era una estrategia para evitar ser indagados por los organismos de control del Estado.
El juez a cargo del expediente, Eduardo Puigdéngolas -actualmente de licencia-, ya dictó la prisión preventiva para Bento. Sin embargo, el polémico magistrado no sólo sigue libre gracias a que el Consejo de la Magistratura ha decidido conservarle los fueros, sino que continúa administrando justicia en Mendoza e incluso es la máxima autoridad electoral de la provincia.
- ¿Aportes? ¿Otra perspectiva? Puede escribir a fgarcia@mdzol.com

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