11 años de prisión para el conductor que mató alcoholizado y se fugó a Bolivia: sus palabras antes de la pena
El hombre que chocó y mató a Juan Manuel y María Laura Viudez fue condenado a 11 años de prisión. Minutos antes pidió perdón, pero dijo que no es culpable.
Adrián Ocampo Cazón, conductor condenado por provocar el siniestro fatal en el Acceso Este.
Pedro Aristarain / MDZMás de 12 años después del fatídico accidente, Adrián Ocampo Cazón, el conductor boliviano que conducía en contramano y borracho cuando provocó el accidente fatal que terminó con la vida de Juan Manuel y María Laura Viudez, fue condenado a 11 años de prisión. Minutos antes de conocer la pena, pidió perdón a la familia de las víctimas, pero dijo ser inocente.
La sala 14 del Polo Judicial Penal recibió durante este lunes la audiencia donde se dio fin a un proceso legal que tuvo en vilo a la familia Viudez por más de una década. Allí, los representantes del Tribunal Penal Colegiado N°2, Carmen Elizabeth Magro, Nancy Lecek y Anibal Crivelli, sentenciaron al sujeto a 11 años de prisión y 10 años de inhabilitación para conducir.
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Sin embargo, se destacó que la condena aún no está firme, ya que se espera que la defensa, a cargo, del abogado Sergio Carreño, recurra la sentencia del tribunal.
"Pido perdón, pero no soy culpable": las últimas palabras de Ocampo Cazón
Apenas unos minutos antes, Ocampo Cazón dio sus últimas palabras antes de conocer su futuro: "Pido perdón a la familia, de todo corazón pido perdón", dijo entre lágrimas. Además, repitió varías veces que "no conocía la zona" y que "quizá entendí mal" cuando un playero le explicó como debía ingresar al Acceso Este, para seguidamente entrar en la vía en contramano.
Sin embargo, el discurso del condenado tomó otro tono cuando volvió a describir que él no era el culpable de la muerte de los Viudez, como lo hizo en la apertura del juicio: "Yo soy parte del accidente, pero no soy el culpable", sostuvo frente a las partes del proceso y la familia de las víctimas, y agregó que el responsable de las dos muertes fue el conductor del auto que tuvo el último impacto con el vehículo de las víctimas, cosa que fue contradicha durante la presentación de la prueba fáctica.
Mientras se aplicaba un cuarto intermedio antes de darse a conocer la pena, uno de los familiares de los fallecidos comentó a MDZ que, "si de verdad estuviera arrepentido no se hubiera fugado, se hubiera quedado a afrontar las consecuencias", y sobre la versión que acababa de escuchar de Ocampo Cazón sostuvo: "No se hace cargo, lo sigue culpando a otro".
Cómo fue el extenso proceso entre Bolivia y Mendoza
Una vez terminada la audiencia, la fiscal de Homicidios Claudia Ríos, a cargo de la causa, expresó su satisfacción por el fallo, aunque la pena impuesta fue menor a la solicitada por la fiscalía (16 años) y la querella (20 años): "La verdad que lo hemos recibido con este con mucha alegría, porque este es un hecho que pasó hace tanto tiempo"
Ríos hizo hincapié en la complejidad de la captura y posterior extradición, señalando que Ocampo Gazón, de nacionalidad boliviana, huyó por rutas alternativas debido a los pedidos internacionales. Pudo determinarse el paradero del condenado gracias al trabajo conjunto de la familia, el Ministerio Público Fiscal (MPF) e Interpol Argentina.
La fiscal aprovechó para agradecer públicamente la colaboración internacional, a la que describió como vital para evitar la prescripción de la causa. Reconoció especialmente a las autoridades de Bolivia, incluyendo a Yanina Cornejo (jefa de la unidad de allá), a Juan Carlos Basualdo director nacional de Interpol Bolivia, a Marcos Ramos, de la Secretaría del Tribunal Superior, Miguel Guzmán, y al Dr. Lázaro Rocha, juez de Bolivia.
Destacó que estos colaboradores pudieron "acelerar el trámite de la extradición que se había solicitado en su momento", luego de que el señor Ocampo Casón fuera detenido y permaneciera dos meses bajo custodia en el vecino país.
La reconstrucción del choque
La reconstrucción del hecho indicó que Ocampo Cazón, se metió en contramano por el Acceso Este, luego de detenerse a cargar combustible en una estación de servicio en el año 2013. Allí, el conductor le preguntó a un playero cómo llegar a una fiesta en el barrio 25 de Mayo de Rodeo del Medio, Maipú, pero seguidamente hizo caso omiso a las direcciones y entró a la autopista mendocina en dirección contraria, hacia el este.
Allí, el detenido se cruzó con tres autos: primero un Renault 147 conducido por uno de los testigos, de apellido Fernández, quien, al verlo circular a gran velocidad, le hizo señas de luces. Pese a que Ocampo Cazón le respondió, no corrigió la trayectoria.
Luego, el siguiente auto con el que topó el acusado en su temerario recorrido fue un Peugeot 504, en el que viajaba parte de la familia de las víctimas. Ese rodado logró esquivarlo. Sin embargo, el vehículo que iba detrás, un Peugeot 405, no tuvo la misma suerte e impactó de frente con el vehículo de Ocampo Cazón. Una vez que el rodado donde viajaban las víctimas se detuvo, quedó desplomado sobre ese tramo de la ruta 7 y otro automóvil lo colisionó.
De acuerdo con el trabajo forense, fue el impacto provocado por Ocampo el que generó las heridas que llevaron a muerte del padre y su hija: un shock hipovolémico y múltiples politraumatismos en el caso de Juan Manuel y un traumatismo cráneo-encefálico grave que presentaba María Laura.



