El ingrediente mágico que sirve para blanquear las zapatillas

Las zapatillas blancas se han convertido en un imprescindible en el guardarropa de muchas personas debido a su versatilidad. Su capacidad para combinar con una amplia gama de colores y estilos las convierte en una elección atemporal para cualquier ocasión. Ya sea para una salida informal con amigos o para un evento más formal, los tenis blancos aportan un toque moderno y fresco al conjunto, adaptándose a diferentes estilos y personalidades.

A pesar de su popularidad, el calzado blanco presenta un desafío común: la facilidad con la que puede ensuciarse. La blancura impecable de estas zapatillas a menudo se ve amenazada por cualquier mínimo contacto con el suelo, ya sea por polvo, lodo o simplemente una pequeña salpicadura. Este aspecto puede generar cierta preocupación entre quienes buscan mantener su calzado en condiciones impecables.

Sin embargo, el mantenimiento de las zapatillas blancas no debería ser un obstáculo para disfrutar de su elegancia y comodidad. Existe una importante variedad de productos de limpieza especializados, pero sobre todo existen varios trucos caseros que permiten mantener la blancura original de los tenis. En este artículo te presentamos un truco mágico que puede dejar tus tenis de tela con aspecto a nuevo y el ingrediente estrella es la maicena.

El primer paso para limpiar los tenis blancos es sumergirlos en agua fría o tibia, pero nunca caliente. Luego utiliza el jabón blanco y con ayuda de un cepillo de dientes o un cepillo de cerdas blandas, refriega en la superficie que tenga manchas. Una vez que hayas acabado con este paso, enjuaga con abundante agua y vuelve a utilizar el cepillo. Es importante que no queden restos de jabón porque, luego cuando se secan las zapatillas se ven como manchas amarillentas. 

Una vez que los tenis estén completamente limpios y mojados, es momento de aplicar la maicena. Para esto, lo único que tienes que hacer es espolvorear directamente sobre los lugares que quieres limpiar, pero lo recomendable es que lo repartas por toda la zapatilla, así hace el efecto en todos lados. Una vez que termines, quedará como una pasta pegajosa. Ahora solo queda dejarlas secar al aire, evita exponerlas directamente al sol, ya que esto puede dañar el material. Una vez que el calzado este seco, retira la maicena con ayuda de un trapo o con un cepillo y verás que han desaparecido todas las manchas.