Chespirito

De qué signo era Roberto Gómez Bolaños y cómo era su personalidad

El creador de El Chavo del 8, el programa cómico mexicano producido por Grupo Televisa, nació el 21 de febrero de 1929.

Napsix viernes, 8 de julio de 2022 · 00:38 hs
De qué signo era Roberto Gómez Bolaños y cómo era su personalidad
Roberto Gómez Bolaños

Roberto Gómez Bolaños, o más conocido como Chespirito, conquistó a los televidentes con sus entrañables personajes. El Chavo del 8el Chapulín Coloradoel Doctor ChapatínChaparrón Bonaparte y Vicente Chambón, son los que él interpretó y a estos se suman los que creó: La Chilindrina, Quico, Don Ramón, el Profesor Jirafales y muchos muchos más.

Se lo conocía como una persona alegre que se encargaba de hacer reír y siempre transmitía felicidad. Sin embargo, lo que muchos no saben es su infancia no fue de las más fáciles y alegres. Cuando tenía seis años, su papá sufrió un derrame cerebral que, finalmente, lo llevó a la muerte. Desde ese momento, su familia comenzó un fuerte crisis económica que lo llevó a trabajar en el circo que estaba enfrente de su casa.

El Chavo del 8

El comediante colaboraba en las funciones que se realizaban en la carpa y recaudaba dinero para contribuir en su hogar. Ese fue su primer contacto con el mundo artístico y lo marcó para siempre. A los 10 años, un perro lo atacó y le trajo grandes problemas de salud. Chespirito debió ser sometido a un tratamiento antirrábico y por un año debió abandonar la escuela por completo.

Roberto Gómez Bolaños, el creador de El Chavo del 8

Bolaños nació un 21 de febrero y era de Piscis. Y, ¿cómo era su personalidad? Quienes nacieron bajo este signo del zodíaco son personas tranquilas, pacientes y amables. Son sensibles a los sentimientos de los demás y responden con simpatía y tacto al sufrimiento de otros. Son muy queridos por su carácter afable y cariñoso. No suelen tomar la iniciativa para resolver problemas. Les preocupan más los problemas de otros que los propios.

A los Piscis no les gusta sentirse confinados y no respetan las convenciones, pero tampoco tienen la energía o la motivación para luchar contra el poder establecido. En ocasiones se retiran hacia un mundo de sueños en el que sus capacidades les aportan beneficios y son seres muy creativos artísticamente.

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