Así es la nueva ruta marítima que va a cambiar el comercio mundial
El Arctic Express conecta puertos de China y Europa a través del Ártico, reduce el tránsito a 18 días frente a los 30 o 40 de la vía del Canal de Suez y abre un nuevo capítulo en el comercio global.

El “China-Europe Arctic Express” reduce a 18 días el tránsito marítimo entre Asia y Europa, frente a los más de 30 días de la ruta por Suez.
ShutterstockLa madrugada del 23 de septiembre de 2025 quedó marcada en la historia del comercio marítimo. Ese día, la partida del buque Istanbul Bridge desde el puerto de Ningbo-Zhoushan inauguró la primera ruta exprés que une China con Europa a través del Ártico. El nuevo servicio, denominado Arctic Express, acorta de manera drástica los tiempos de navegación entre ambos continentes y se proyecta como un hito destinado a redefinir las rutas del comercio global.
El trayecto conecta los principales puertos chinos —Ningbo, Shanghái, Qingdao y Dalian— con terminales estratégicas de Europa como Felixstowe en el Reino Unido, Róterdam en Países Bajos, Hamburgo en Alemania y Gdansk en Polonia. El recorrido aprovecha la Ruta del Mar del Norte (NSR), que cruza el océano Ártico, y convierte a este corredor en el enlace más rápido para el transporte de contenedores entre Asia y Europa.
Te Podría Interesar
El viaje inaugural hacia Felixstowe se completará en 18 días, lo que establece un nuevo récord frente a las 26 jornadas que había requerido la conexión más veloz anterior, registrada en 2024. En comparación con la ruta tradicional a través del Canal de Suez —que demora entre 30 y 40 días (720 a 960 horas)—, la nueva vía permite ahorrar hasta 22 jornadas de navegación y reducir en un 50% las emisiones de carbono por trayecto.
La salida del Istanbul Bridge se produjo a las 4:30 de la madrugada del 23 de septiembre, cuando zarpó desde el puerto de Beilun, en Ningbo-Zhoushan, con más de mil contenedores a bordo. La carga combina bienes de consumo, ropa, baterías de litio y equipos de almacenamiento de energía, además de miles de envíos de comercio electrónico, en línea con la creciente demanda entre China y Europa.
Este corredor resulta especialmente atractivo para las compañías que buscan sincronizar sus exportaciones con la temporada alta de abastecimiento en Europa previa a Navidad. Al mismo tiempo, la nueva ruta confirma la viabilidad del transporte comercial en aguas árticas y se enmarca en la denominada “Ruta de la Seda de Hielo”, concebida como parte de la Iniciativa de la Franja y la Ruta.
Un nuevo eje de la “Ruta de la Seda Polar”
Además de la ventaja en tiempos, el trazado por el Ártico también se presenta como un entorno estable en términos políticos y de seguridad, lo que reduce riesgos asociados a la piratería o a los bloqueos en zonas de conflicto. En diálogo con Global Times, Li Xiaobin, director de operaciones de la naviera Sea Legend, sostuvo que “el China-Europe Arctic Express es más corto y eficiente, lo que mejora la cadena de suministros y disminuye costos”.
La importancia de la rapidez fue subrayada por Zhou Chujing, gerente de compras logísticas de la compañía Sigenergy, quien explicó al mismo medio que cada contenedor de equipos de almacenamiento doméstico enviado en este primer viaje tiene un valor aproximado de 300.000 dólares, y que la elección de la nueva ruta se debe “a sus tiempos de tránsito favorables, que fortalecen toda la cadena de comercialización”.
En el plano estratégico, Jian Junbo, director del Centro de Relaciones China-Europa de la Universidad de Fudan, indicó a Global Times que este corredor “puede convertirse en un bien público internacional”, al que podrían sumarse países como Japón y Corea del Sur.
Por su parte, la naviera Zhejiang Seaport Group señaló en declaraciones al mismo medio que el lanzamiento de la ruta representa la pieza final que consolida la red global de Ningbo-Zhoushan, ahora conectada con los principales océanos —Pacífico, Atlántico, Índico y Ártico—, reforzando así el rol del puerto como nodo central del comercio marítimo internacional.