Por qué se divorciaron Alberto Cormillot y su primera esposa

Alberto Cormillot está viviendo un gran presente personal con su flamante paternidad de Emilio, el bebé que llegó a este mundo para cambiarle la vida a él y a su esposa, Estefanía Pasquini.

Emilio nació el pasado septiembre y convirtió al médico de 82 años en padre por tercera vez. Alberto ya tenía a Reneé y Adrián, frutos de su relación con su primera esposa, Monika Arborgast.

Quizá muchos conocen todo sobre la historia de amor del doctor Cormillot y la joven nutricionista 48 años menor, pero pocos saben quién era realmente Monika en la vida del reconocido profesional.

Alberto Cormillot y Monika Arborgast se conocieron en 1961 en los pasillos del hospital Alemán, donde él daba los primeros pasos en su carrera como médico y ella trabajaba de secretaria. 

Vivieron un apasionado noviazgo que duró dos años y finalmente se casaron. Lo más extravagante de aquella unión fue su lujosa luna de miel, en la que viajaron por México, San Francisco, Los Ángeles, Nueva York, Londres, París, Madrid, Roma, Milán, Capri, Egipto, Grecia, Barcelona y otras ciudades europeas. 

De aquella relación nacieron Reneé y Adrián Cormillot y los cuatro consolidaron una hermosa familia. Pero finalmente la pareja llegó a su fin en 1976, cuando el menor de sus hijos tenía solamente dos años de vida. 

El motivo simplemente había sido que el amor y el romance se terminó, pero el cariño estaba intacto y por eso nunca se distanciaron ni mantuvieron lejos, por el contrario siguieron trabajando codo a codo. “Nos llevábamos muy bien. Después de separarnos, yo cenaba seis veces por semana en su casa, con los chicos. Después, con el tiempo, pasé a cuatro, tres veces”, le confió a La Nación.

Alberto y Monika fundaron juntos la famosa clínica y la fundación que tiene el médico, y siendo la mujer el sostén que mantenía todo funcionando a la perfección. Fue Arborgast quien llevó adelante los negocios familiares y manejaba todo. 

“Si bien estábamos separados, nos vimos todos los días durante 56 años, porque trabajábamos juntos y la vida familiar también continuó, porque todo giraba en torno a ella por nuestro excelente vínculo. Pasábamos las fiestas familiares y las comidas semanales con los nietos se hacían en su casa”, confió Alberto Cormillot en 2017, cuando Monika falleció debido a un cáncer de pulmón. 

“A pesar de no vivir juntos compartíamos muchas cosas. Su fallecimiento fue un golpe muy duro para mí. La extraño mucho porque era la gran madre de toda la organización y nos malcrió tanto a mí como a mis dos hijos”, reveló el médico sobre su gran compañera de vida.