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Ford cumple 100 años en México: historia de su primera fábrica en la Ciudad de México

Coincidió con la reanudación de las relaciones diplomáticas entre México y Estados Unidos y respondía a la estrategia de Ford de expandirse a nivel mundial.

Ford cumple 100 años en México: historia de su primera fábrica en la Ciudad de México

Ford cumple 100 años en México: historia de su primera fábrica en la Ciudad de México

Ford

En 1925, en un contexto de reconstrucción nacional tras la Revolución Mexicana y con el país orientado hacia la modernización, Ford tomó una decisión que marcaría un hito en la industria automotriz local: establecer su primera planta de ensamblaje en la Ciudad de México.

Este movimiento coincidió con la reanudación de las relaciones diplomáticas entre México y Estados Unidos en 1923, y respondía a la estrategia global de Ford de expandirse fuera del territorio estadounidense, con México como uno de los mercados clave por su creciente interés en la movilidad moderna.

Fue Henry Ford quien designó a Russell I. Roberge, uno de sus colaboradores de confianza, para evaluar directamente el potencial del país. Su análisis concluyó que México reunía las condiciones ideales para convertirse en una plataforma estratégica para la compañía.

Ford cumple 100 años en México: historia de su primera fábrica en la Ciudad de México
Ford cumple 100 años en México: historia de su primera fábrica en la Ciudad de México

Ford cumple 100 años en México: historia de su primera fábrica en la Ciudad de México

Ensamblar vehículos localmente resultaba más eficiente que importar unidades completas, y a esto se sumaba el talento técnico de los trabajadores mexicanos, una clase media emergente con aspiraciones de progreso y un contexto propicio para el desarrollo industrial.

El 23 de junio de 1925 se firmó el acta constitutiva de Ford Motor Company S.A. de C.V., y las primeras oficinas se ubicaron en el edificio Palavicini de la calle Bucareli número 13. La planta se estableció en San Lázaro, en la zona oriental de la capital, y comenzó a operar formalmente en 1926.

Desde esa ubicación se ensamblaron los primeros vehículos que pronto se integraron al paisaje urbano y a la vida diaria del país. El gobierno mexicano también colaboró activamente en este proceso, ya que compartía el interés por impulsar la industrialización del país, mientras Ford encontraba en México una oportunidad de expansión sólida.

Desde sus inicios en territorio mexicano, Ford se involucró en la formación técnica de personal, promovió la creación de centros educativos y colaboró con comunidades locales en distintos programas de desarrollo.

La historia de Ford en México Foto: Ford
La historia de Ford en México Foto: Ford
La historia de Ford en México Foto: Ford

Los empleados recibían remuneraciones considerablemente superiores al promedio nacional, junto con beneficios adicionales que superaban los estándares laborales de la época.

Durante un periodo, Ford también fabricó componentes para aeronaves utilizadas por aerolíneas mexicanas. Este intercambio técnico permitió a mecánicos nacionales modificar los famosos aviones trimotor de Mexicana de Aviación para mejorar su rendimiento, una hazaña que incluso llamó la atención de los ingenieros de la sede central en Detroit.

Para 1930, la planta de San Lázaro ya había superado su meta inicial de producción, pasando de ensamblar 10 vehículos por día a fabricar hasta 30 unidades diarias. En sus primeros cuatro años de operación, esta instalación alcanzó un volumen de más de 26,000 automóviles producidos.