Qué fue de Playa Franka, el balneario nudista que impulsó Moria Casán en los ‘90

Moria Casán es una figura indiscutida del mundo del espectáculo argentino hace décadas. Además de frases que quedaron en la memoria popular y todos sus éxitos en la TV, la diva en varias oportunidades inició proyectos que dieron que hablar. Uno de ellos fue Playa Franka, un destino nudista que "La One" impulsó a principios de los años 90, en un momento que la Argentina vivía una época de cambios sociales y culturales.

En ese contexto, Moria Casán decidió incursionar en un nuevo negocio: un balneario nudista a escasos kilómetros de Mar del Plata.

El nacimiento de Playa Franka, con el sello de "La One"

Playa Franka abrió sus puertas en el verano de 1994, ubicado en Playa Dorada, a unos 20 kilómetros de Mar del Plata. La idea surgió de Moria y su entonces marido, Luis Vadalá, quienes buscaban crear un espacio donde las personas pudieran disfrutar del sol y la playa sin la obligación de usar ropa.

“Estamos muy estructurados. Todavía faltan lugares donde la gente se distienda y se sienta realmente libre. Normalmente estas cosas se hacen afuera de nuestro país, y está bueno que se hagan acá. Ojalá que prospere la idea de un lugar libre para todo el mundo”, dijo la diva en la inauguración.

El balneario se convirtió rápidamente en un éxito, atrayendo a miles de personas de todo el país y del extranjero. Playa Franka era más que un lugar para tomar sol y nadar, era un espacio de libertad donde las personas podían expresarse sin prejuicios. Sin embargo, Playa Franka también generó mucha controversia. Algunos sectores de la sociedad argentina criticaron duramente el proyecto, considerándolo inmoral y obsceno. Incluso hubo quienes intentaron clausurarlo.

A pesar de las dificultades, Playa Franka resistió durante 10 años. Sin embargo, la crisis económica de 2001 y la posterior devaluación del peso argentino afectaron gravemente al negocio. Finalmente, Playa Franka cerró sus puertas en 2004. Pese a su corta existencia, Playa Franka dejó un legado importante en la cultura argentina.

Tras el cierre de Playa Franka, el predio quedó abandonado durante varios años. En 2010, un grupo de inversores lo compró con la intención de reabrirlo como balneario nudista, pero el proyecto nunca se concretó.