Cuánto se necesitó en la Ciudad de Buenos Aires para seguir siendo clase media durante noviembre
Según la publicación del ICP del Indec, en noviembre la inflación fue del 2,4%. Aún así, el costo de vida en la capital del país no deja de encarecerse.
Este cierre de año llega con un encarecimiento del costo de vida en la Ciudad de Buenos Aires que, a pesar de que los datos de inflación muestran una desaceleración, no baja del 3%. Luego de anunciar que el índice de precios ascendió al 3,2% para noviembre, el Instituto de Estadística y Censos porteño confirmó que una familia tipo necesitó $1.614.641 para mantenerse dentro de la clase media.
Este número mensual es la consecuencia de los aumentos y actualizaciones de algunos bienes y servicios básicos para los hogares como cuotas de colegios, expensas, combustibles, luz, agua y medicina prepaga. Este piso establecido por el organismo porteño para no caer en la pobreza toma como referencia los gastos de propietarios con cuatro integrantes, dos mayores en edad de trabajar y dos menores de edad.
Los datos que se desprenden del informe mensual sobre Líneas de pobreza y canastas de consumo para la ciudad muestra que fue necesario un ingreso de $44.379 más que el mínimo requerido en octubre para posicionarse estadísticamente dentro del grupo de “clase media”. El mes anterior se requirieron $1.588.250, esto significa que el aumento de los valores fue del 1,7%.
Distinto es el caso de aquellos con una vivienda alquilada si se toma en cuenta que el promedio de los cánones en la ciudad aumentaron a $725.189. Esta información que publica Zonaprop Index surge de la publicación de avisos de esta compañía dedicada a la búsqueda de casas y departamentos. Por lo tanto, estas familias necesitaron $2.339.830 para no salir de la clase media.
En cuanto a la canasta básica alimentaria (CBA), según la cual se fija la línea de indigencia, el estudio determinó que fue necesario un ingreso de $551.679 en noviembre. Para este cálculo solo se tiene en cuenta el valor de productos indispensables para subsistencia.
Por su parte, la canasta básica total (CBT), toma como referencia el precio de alimentos y de otros gastos en bienes y servicios como por ejemplo el transporte, artículos de limpieza, expensas, tarifas de servicios públicos, ropa, esparcimiento, salud, educación y comunicación. Este indicador dio como resultado que una familia debió tener un ingreso de $1.032.246 en noviembre para no ser considerada pobre.
El informe fija una cifra intermedia para ubicar a los hogares que están entre la línea de pobreza y el índice de indigencia. De esta manera, una casa tipo tuvo que conseguir un ingreso de $1,291.713 para encuadrar dentro del nivel de “no pobres vulnerables”. Según el informe, ese mismo hogar tiene cuatro integrantes (dos mayores y dos menores).
Finalmente, el estudio establece otro escalón a los que pertenecen los que son considerados “acomodados”. En este punto se ubican las familias que tuvieron una entrada mensual mayor a los $5,2 millones en noviembre.