Posdata Café: la innovadora propuesta gastronómica que cuenta más de un siglo de historia del Correo Argentino
El primer café postal del país permite que los grandes recuerden y los chicos conozcan la magia de las cartas de papel.
Posdata Café se encuentra en la calle Manuel Quintana al 48 y es un local oficial del Correo Argentino.
Paula BressiAbiertos al público aproximadamente desde hace un mes, el local de Posdata Café cuenta con cafetería de especialidad, papel, postales, sobres de papel madera y sellos de lacre con símbolos como el Sol de Mayo, la bandera argentina o el escudo nacional.
Existe la posibilidad de solamente tomarse un café, tomar una hoja de papel y escribir una carta que luego puede ser enviada por el valor de $2.400, que consta de la impresión de la etiqueta para el Correo Argentino. Sin embargo, para vivir la experiencia completa, la utilización de un sobre y el sello de lacre de preferencia para el cierre tiene un valor de $5.700.
Te Podría Interesar
"Todo acá lleva su tiempo", dice Carolina entre risas mientras prende la vela debajo del sello de lacre y este se derrite lentamente.
La propuesta que va más allá de tomarse un café
En PosData, la propuesta va más allá del café. “Acá la invitación es a detener un poquito el tiempo”, explica Carolina Barone, al describir una experiencia pensada como un paréntesis frente a la lógica de la inmediatez. Quienes cruzan la puerta del local, dice, “entran y pasan a otra dimensión del tiempo”, donde la urgencia de la ciudad queda afuera y la escritura a mano vuelve a ocupar un lugar central.
La escena se repite a diario: personas que aseguran no tener tiempo para sentarse, pero que al ser interpeladas reconocen haber pasado “seis o siete horas conectadas al teléfono”, una contradicción que el espacio busca poner en pausa y resignificar desde lo simple.
En tiempos dominados por pantallas y respuestas inmediatas, el café postal propone algo simple pero poderoso: detenerse, escribir y volver a creer en los rituales. Entre buzones, papel madera y la promesa de que Papá Noel recibe cada carta, Posdata invita a reconectar con lo analógico y, sobre todo, con los demás.



