Por qué la elefanta Kenya viaja parada en la jaula que la lleva al santuario en Brasil
El viernes, la elefanta Kenya se fue del Ecoparque rumbo a Brasil. Esperan que mañana llegue al santuario. Los motivos para que viaje seis días parada.

La elefanta Kenya en la jaula de transporte.
Santuario Global de Elefantes.El viaje de la Kenya desde el Ecoparque de Mendoza -el lugar donde vivió en cautiverio durante 40 años- hasta el santuario de elefantes en Brasil es seguido por miles de personas en todo el mundo que luchan para que no haya más animales encerrados.
Por qué Kenya viaja parada
El traslado que va por su quinta jornada, ha despertado la curiosidad sobre los elefantes y las condiciones en las que está viajando Kenya hasta Mato Grosso. Una de las preguntas más frecuentes es si en el recinto la elefanta tiene espacio para recostarse y dormir.
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La verdad es que Kenya viaja parada en una jaula y tiene un motivo de seguridad para que el operativo especializado se haya decidido de esta manera.
“Kenya no puede acostarse en la jaula porque si tiene espacio para tumbarse, tiene espacio para voltear la jaula”, explicaron desde el Santuario Global de Elefantes.
“Para acostarse y pararse, Kenya necesitaría una jaula de tres metros de ancho y la jaula se convertiría en una carga ancha creando una situación insegura. También se corre el riesgo de que la elefanta quede atascada porque no tiene el espacio para balancear las patas”, agregaron los expertos.
Además, desde el santuario indicaron que los elefantes pueden estar parados durante días o semanas y que Kenya ha pasado muchas semanas sin tumbarse por lo que viajar cinco días parada no afecta su salud.
Cuándo llegará al santuario
Kenya se fue del Ecoparque de Mendoza el viernes 4 de julio cerca de las 19. Cuando cruzó el portón se despidió con un fuerte trompeteo que emocionó a un grupo de personas que había ido a despedirla.
Ayer, la elefanta estuvo por última vez en suelo argentino -cerrando una triste historia de 136 años de elefantes en cautiverio en el país- y llegó a Brasil.
Según el detalle del viaje, en la aduana demoraron solo dos horas pero hubo una falla en la batería del camión por lo que la caravana hizo noche en Brasil. Los cuidadores aprovecharon para limpiar la jaula y que Kenya tomara agua de coco y algunas frutas locales. Hoy cerraron el quinto día de viaje y esperan llegar mañana al santuario.