Nuevas terapias farmacológicas en Argentina: semaglutida y tirzepatida, alternativas contra la obesidad
La semaglutida y tirzepatida amplían las opciones de tratamiento en Argentina, ofreciendo soluciones para una enfermedad crónica que afecta a millones.
La obesidad deja de ser un callejón sin salida para transformarse, cada vez más, en una enfermedad tratable.
Archivo MDZSemaglutida y tirzepatida amplían las alternativas terapéuticas para médicos y pacientes. La obesidad es una enfermedad crónica, compleja y recidivante, con bases biológicas, hormonales y metabólicas bien definidas. Lejos de ser un problema de voluntad individual, se asocia a un mayor riesgo de diabetes tipo 2, enfermedad cardiovascular, hipertensión, dislipidemia, hígado graso, deterioro funcional y peor calidad de vida.
En este contexto, la llegada reciente de nuevas terapias farmacológicas a la Argentina constituye una muy buena noticia, no solo para las personas que viven con obesidad, sino también para los médicos de nuestro país, que hoy cuentan con más herramientas basadas en evidencia científica para abordar una enfermedad altamente prevalente y subtratada. Recientemente se incorporaron al mercado argentino semaglutida en distintas presentaciones y tirzepatida, desarrolladas por diferentes laboratorios, lo que amplía el abanico terapéutico y permite un abordaje más personalizado, acorde al perfil clínico y metabólico de cada paciente.
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Semaglutida: un avance clave en el tratamiento médico de la obesidad
La semaglutida es un análogo del GLP-1, una hormona intestinal que el propio organismo utiliza para regular el apetito, la saciedad y el metabolismo energético. Su acción se produce tanto a nivel del sistema nervioso central como del tracto gastrointestinal, reduciendo el apetito, aumentando la sensación de saciedad y modulando la ingesta de alimentos. En la Argentina hoy se dispone de: Semaglutida 2,4 mg, Wegovy desarrollada por Novo Nordisk, indicada específicamente para el tratamiento de la obesidad. Semaglutida 2,4 mg, Obetide de origen nacional, desarrollada por el laboratorio Elea, con costos inferiores que amplía el acceso a esta clase terapéutica dentro del sistema de salud argentino.
Los estudios clínicos con semaglutida han demostrado descensos de peso clínicamente significativos, sostenidos en el tiempo, acompañados de mejoras en la presión arterial, el perfil lipídico, la glucemia, la inflamación crónica de bajo grado y el riesgo cardiometabólico global. Es importante aclarar que la evidencia clínica robusta que respalda estos resultados proviene de los estudios realizados con semaglutida 2,4 mg desarrollada por Novo Nordisk, utilizada en los ensayos clínicos internacionales que fundamentaron su aprobación para el tratamiento de la obesidad.
En la Argentina, a esta opción se suma Obetide, una semaglutida sintética de producción nacional, desarrollada por el laboratorio Elea, que amplía el acceso a esta clase terapéutica, con un costo significativamente inferior, lo que representa una ventaja relevante en términos de disponibilidad y sostenibilidad del tratamiento dentro del sistema de salud. Más allá de la marca, la semaglutida representa un cambio conceptual profundo: dejar de exigirle al paciente que luche contra su biología, y comenzar a acompañarlo con herramientas que trabajen a favor de ella, siempre dentro de un abordaje médico, individualizado y sostenido en el tiempo.
Tirzepatida: una nueva clase terapéutica que amplía el horizonte
A este escenario se suma la reciente llegada de tirzepatida, Mounjaro una molécula innovadora desarrollada por Eli Lilly, con comercialización en la Argentina a través de Adium. Tirzepatida inaugura una nueva clase terapéutica, al ser el primer fármaco con acción dual sobre los receptores GIP y GLP-1, dos hormonas intestinales clave en la regulación del metabolismo. Esta acción combinada genera un efecto sinérgico que se traduce en descensos de peso más profundos, junto con mejoras marcadas en la sensibilidad a la insulina y el metabolismo del tejido adiposo. Los estudios clínicos muestran que tirzepatida puede lograr, en un alto porcentaje de pacientes, reducciones del 20 al 25% del peso corporal, cifras que hasta hace poco solo se observaban con cirugía bariátrica.
Un aspecto central es que esta pérdida de peso se produce predominantemente a expensas de masa grasa, con mejor preservación de masa muscular, lo que impacta positivamente en la salud metabólica, la funcionalidad y la calidad de vida. Además, mantiene los beneficios cardiometabólicos ya conocidos de los agonistas del receptor GLP-1 y los potencia a través de una mayor reducción del exceso de adiposidad y de la inflamación crónica asociada a la obesidad.
Más alternativas para una enfermedad compleja
La incorporación de semaglutida, tanto de desarrollo internacional como nacional y de tirzepatida no implica que todos los pacientes deban recibir tratamiento farmacológico, ni que exista una solución única para la obesidad. Implica algo más valioso: más alternativas terapéuticas para individualizar el tratamiento, según la historia clínica, el perfil metabólico, las comorbilidades y las necesidades de cada persona.
Para los médicos argentinos, este nuevo escenario representa una oportunidad concreta de:
Tratar la obesidad como la enfermedad crónica que es
- Reducir el tiempo de exposición al exceso de adiposidad
- Prevenir o retrasar complicaciones cardiometabólicas
- Mejorar la calidad de vida de los pacientes
En un país con alta prevalencia de obesidad, contar con más herramientas basadas en evidencia es una noticia positiva, que permite avanzar hacia un abordaje más moderno, menos estigmatizante y centrado en la salud.
Información confiable frente al ruido de las redes
Estamos viviendo una etapa de enorme avance científico, pero al mismo tiempo circula en redes sociales una cantidad creciente de información falsa, alarmante y muchas veces amenazante, que genera miedo, confusión y decisiones inapropiadas en la población. El tratamiento de la obesidad debe ser médico, personalizado y acompañado. Estas herramientas no son milagrosas ni peligrosas por definición: son avances científicos que deben ser utilizados con responsabilidad, criterio clínico y seguimiento profesional.
Un paso adelante en salud pública
La obesidad deja de ser un callejón sin salida para transformarse, cada vez más, en una enfermedad tratable, con múltiples estrategias posibles y con respaldo científico sólido.
Que la Argentina cuente hoy con más opciones terapéuticas, incluyendo desarrollos nacionales, es una buena noticia y una oportunidad para mejorar la salud de millones de personas, siempre desde un enfoque serio, ético y basado en evidencia.
* Dra. María Virginia Busnelli, Médica especialista en Nutrición (MN 110351). Presidenta de la Sociedad Argentina de Nutrición (SAN)



