La historia (completa) del chino que apareció descuartizado en una conservadora

Marcos, cuyo verdadero nombre era Chen Qinai (36), no había sido visto desde el domingo y sus familiares se preguntaban dónde estaba, ya que "no era de ausentarse" del supermercado en el que trabajaba. Al pasar las horas, su hermano Leo (Chen Qinde, 33) llamó a la Policía. 

En ese momento todavía no se avizoraba el horripilante final que había tenido Marcos. Los efectivos llegaron al súper -ubicado en Boedo al 900, en Bernal (Quilmes, prov. de Buenos Aires)- y empezaron a hacer preguntas.

En el lugar había otro hombre, Mario (en realidad, Ma Fenrong, 40) que vivía con Marcos desde hace un mes y tenía algunos negocios con el desaparecido. Los investigadores hablaron con él y también con el repositor, el venezolano Elliezer Alexander Mujica (37). Y fue en esta última conversación que surgieron algunas sospechas. 

Pistas

El repositor afirmó que había visto a Marcos el domingo al mediodía y que el lunes, cuando llegó a trabajar, notó que Mario estaba limpiando con especial ahínco. 

"Me pareció raro, porque Mario no es de limpiar así", observó el testigo. Agregó también que le habían llamado la atención las bebidas en el suelo y varias manchas de sangre esparcidas por el local. 

Mario comprendió que lo iban a llevar detenido

Los efectivos miraron a Mario y el aludido entendió que lo iban a llevar detenido. Al rato cayó Policía Científica y requisó las cámaras de seguridad, aparte de verificar posibles rastros en la escena del crimen. 

Más tarde, los pesquisas hallaron a Marcos en pedazos y dentro de una conservadora de telgopor. Otros restos estaban esparcidos por un radio de 100 metros, envueltos en nylon. Todavía se desconoce qué fue lo que ocurrió, pero ninguna teoría se descarta y se cree que puede haber tenido participación alguna mafia. 

Al conocer la noticia, los allegados a la víctima estallaron en llanto e incluso algunas fuentes hablan de una crisis de nervios de la novia de Marcos.