Confirmaron la prisión preventiva para la esposa del "chacal" de la Cuarta Sección

El caso del "chacal de la Cuarta Sección" no termina. Tras cuatro horas de debate, el juez Juan Manuel Pina rechazó el pedido de prescripción que la defensa de Norma Ortubia -la madre de la víctima- había efectuado, y confirmó la prisión preventiva para la acusada.

Ortubia está señalada por haber sido participe necesaria por acción u omisión del delito de abuso sexual con acceso carnal, agravado por el vínculo, en un número indeterminado de hechos y en concurso real. En lenguaje llano: la denunciaron por haber colaborado activamente en las violaciones que Armando Lucero concretó contra su hija Cecilia a lo largo de décadas, fruto de los cuales nacieron siete hijos.

Cuando se destapó esta historia, fue noticia mundial. Lucero fue encarcelado y falleció tras las rejas. Pero con el tiempo surgió una pregunta fundamental: ¿podía juzgarse a la esposa del abusador por el rol que había cumplido?

"Delito continuado"

La defensa de la acusada alegó que los delitos que se le imputaban habían ocurrido muchos años atrás, y por lo tanto la acción penal había prescripto. Pero sentando un precedente único en la provincia, los abogados de la víctima Cristian Vaira Leyton y Agustín Magdalena, junto al fiscal Gustavo Stroppiana, modificaron el avoque e imputaron a Ortubia en la modalidad de delito continuado, abarcando los hechos que ocurrieron entre 1980 y 2009.

Un precedente único en la provincia

"Esto sienta un precedente único en la provincia. Suele plantearse la prescripción de este tipo de delitos: ahora sabemos que no prescriben", comentó a este diario Vaira Leyton. Mientras el letrado conversaba con este periodista, Cecilia lloraba en silencio. Era la emoción: para ella, el juicio contra su propia madre es una forma de cicatrizar heridas.

El caso

Cecilia fue abusada desde su infancia y tuvo 7 hijos fruto de los vejámenes que concretaba su padre. Su familia se movía por diferentes barrios de Mendoza, y residió una larga temporada en la Cuarta Sección de la Ciudad. 

Tras un largo proceso personal, Cecilia se animó a contar su martirio. Lucero falleció en la cárcel. Y en 2018 la víctima decidió denunciar también a su madre, porque considera que sin su participación habría sido imposible que ella sufriera esas agresiones durante décadas.

En los diarios personales que ha escrito la víctima -un modo de procesar su dolor- los episodios se repiten, una y otra vez, y Norma Ortubia siempre aparece: a veces a un costado, otras más cerca. Pero estaba ahí.  "Es inverosímil que no se diera cuenta", repiten desde el entorno de la denunciante. 

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