Un nuevo informe reveló que la pobreza cayó por cuarto mes consecutivo
Tras la publicación del informe de inflación por el Indec, la Universidad Torcuato di Tella marcó una nueva caída de la pobreza, aunque con una tendencia a la estabilidad.
La Universidad Torcuato di Tella publicó un nuevo informe del Nowcast de pobreza realizado por Martín González-Rozada, el cual se basa en distintos índices difundidos por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Luego de que este marcara que la inflación rompió el piso del 3%, la pobreza presenta una nueva caída aunque con una tendencia hacia la estabilidad.
El Nowcast de pobreza es una estimación de la incidencia de la pobreza que se actualiza de forma mensual, teniendo en cuenta los Ingresos Totales Familiares (ITF) que surgen de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) y su comparación con la Canasta Básica Total (CBT). Esta última es un dato que se publica al mismo tiempo que la inflación, teniendo generalmente un menor aumento y basado en los patrones de consumo promedio de los argentinos.
La última estimación de este trabajo, publicado este martes por la tarde, marcó que la tasa de pobreza en la Argentina es del 49%, siendo el cuarto mes consecutivo de caída de este índice. El punto de inflexión se marcó entre junio y julio, cuando pasó del 52,9% de la población afectada al 51,1%, marcando una abrupta caída en plena crisis, mientras el Gobierno estimaba un repunte de la economía a partir de agosto.
Para el siguiente mes, la pobreza alcanzaba al 50,3%, acercándose finalmente a la mitad de la población un número que todo Gobierno teme romper en una crisis y que servía de justificación para las críticas opositoras. Esa ruptura del piso de 50%, que se había alcanzado en marzo tras el ajuste que incluyó la reducción de planes sociales y la baja de planes inflacionarios como el control de precios, llegó finalmente en septiembre, cuando se alcanzó el 49,7%.
Para octubre, el informe de la Universidad Torcuato di Tella estimó que la pobreza oscila en torno al 49%, con un margen que daría un máximo del 50,5% y un mínimo del 47,5%. A pesar de ello, luego de la caída abrupta en julio, el índice parece tender a una estabilidad o una caída más paulatina, a menos que la Economía tenga una soberbia recuperación de la mano con el fin de la recesión.
La clave de este dato es el impacto que puede tener en las generaciones futuras, siempre y cuando se mantenga un trabajo que logre continuar con esta caída de la pobreza. Al mismo tiempo, este es un índice que la Casa Rosada mira con especial atención, ya que si logra romper con la tendencia alcista generalizada de la pobreza que hubo en la última década, podría lograr un resultado muy favorable en las elecciones de medio término.
Cabe señalar que el único Gobierno que logró una caída de la pobreza que llegó al 25% fue el de Mauricio Macri, aunque terminó siendo una situación estacional que rápidamente cambió, sin llegar a las cifras del gobierno de Alberto Fernández y el que enfrentó Javier Milei en sus primeros meses de gestión.
Especialistas en la materia indican que, igualmente, la pobreza es un problema estructural de la Argentina que requiere de muchos años de trabajo para ser reconvertida, donde dar un paso en falso puede ser dramático y sentenciar un nuevo repunte. Del mismo modo, estos pequeños descensos de la pobreza, que parecen insignificantes, pueden ser los primeros pasos de un período de recuperación económica.