Para qué las mujeres tienen que trabajar 91 días más que los hombres
Las diferencias del sistema de acuerdo al género todavía se sienten y, en muchos casos, son batallas. El salario es un aspecto que aún no es justo en su relación entre hombres y mujeres. Las causas.
En Argentina, las mujeres tienen que trabajar cada año 91 días más que los varones para alcanzar sus ingresos. Este dato surge de la brecha salarial de género, que en la Argentina es del 25%, según datos publicados por el Indec el año pasado. El número no es nuevo, por el contrario se mantiene estable desde hace muchos años. "La brecha no existe a propósito", dice Carolina Villanueva, licenciada en Ciencia Política, co fundadora y directora de Grow, y explica, desde su punto de vista, cómo podría revertirse esto.
"Que se le pague distinto a hombres y mujeres por el mismo trabajo tiene que ver con que hay causas estructurales de la economía y la sociedad que lo explican. Por ejemplo, que las mujeres se dedican al cuidado de los hijos y las hijas y tienen menos tiempo para el trabajo productivo", señaló Villanueva.
Por otro lado añadió que también aparecen entre las razones que ellas "se concentran en las industrias peor remuneradas, como la educación y la salud" o "que están sobre representadas en los trabajos más informales, como es el trabajo en casas particulares. Y por ejemplo, que ganan mucho menos dinero a menor nivel educativo que sus pares varones".
Todo esto redunda en que una mujer en Argentina, en promedio, tiene que trabajar 91 días más para ganar lo mismo que sus pares varones.
Qué es la brecha salarial
La ONU Mujeres define la brecha salarial de género como el porcentaje resultante de dividir dos cantidades: la diferencia entre el salario de los hombres y las mujeres, dividida entre el salario de los hombres. Este porcentaje es la respuesta a la siguiente pregunta: ¿Cuánto más cobran de salario los hombres que las mujeres? Si la cifra es negativa, significa que las mujeres cobrarían más.
Cómo se explica la brecha salarial
- Por el empleo a tiempo parcial: el porcentaje de mujeres que trabajan a tiempo parcial es mayor que el de los hombres. En muchas ocasiones, las mujeres reducen su jornada para hacer frente al trabajo no remunerado de cuidado de sus familias, especialmente a raíz de su maternidad. Los trabajos a tiempo parcial están peor remunerados que los trabajos a tiempo completo.
- Por peores empleos: Las mujeres están más presentes en sectores y empleos peor remunerados. Las mujeres tienen menos posibilidades de obtener empleos de mayor nivel, y de progresar en su carrera profesional, siendo la maternidad una de las circunstancias que provocan esa discriminación.
- Por desempeñarse en trabajos socialmente menos valorados: Las mujeres realizan trabajos por cuenta ajena que están asociados a los trabajos de cuidados. Estos trabajos se encuentran fuertemente feminizados.
- Por autominusvaloración: Las mujeres sufren discriminación en el mercado laboral por lo que negocian menos su salario y aceptan con más facilidad lo que se les ofrece.
- Por ignorancia: Los empleadores, públicos y privados, no analizan en detalle las remuneraciones que dan a sus trabajadoras y trabajadores. Las estadísticas globales de diferencias salariales son confusas, y no se dispone de análisis que permitan identificar su origen preciso.