Caso Insaurralde, la necesidad perversa de mostrar lo robado
Mauricio Girolamo, licenciado en Psicología, analizó la personalidad de Insaurralde tras el escándalo: manipuladora y sin empatía, “que busca ostentar trofeos robados”.
El escándalo desatado tras las fotos de Martín Insaurralde y la modelo Sofía Clerici en un lujoso yate en Marbella, España, es tema de análisis psicológico.
Es por eso que el licenciado en Psicología Mauricio Girolamo explicó en MDZ Radio 105.5 FM las características de este tipo de personalidad: manipuladora y sin empatía, “que busca ostentar trofeos robados”.
“Este político (Insaurralde) no puede con él mismo; es como ‘miren este amo que soy, que tengo este poder y necesito mostrarlo’, lo cual es una forma de perversión”, explicó Girolamo en Según Cómo lo Mires; “No puedo hacer este robo tan grande y guardármelo sin que nadie lo vea”.
Y siguió: “Aparece una dosis de omnipotencia del perverso, del manipulador, en donde lo que está mostrando es esa impunidad, esa sensación de ‘yo soy más que ustedes, ustedes son tontos’; una sensación de superioridad sobre el otro. La idea es, tengo esto y necesito que el mundo lo vea”.
Girolamo definió la empatía como “la capacidad que tiene una persona de poder ponerse en el lugar de la otra persona y asemejarse al sentimiento que puede estar teniendo ese ser en esa circunstancia y volver a los zapatos de uno”. Y aseguró, sobre Insaurralde: “Lo que vemos en este caso es que no existe la chance de ponerse en el lugar del otro; es más, es mirar al otro y verlo como un ser inferior. No hay escrúpulos”.
Escuchá la columna de Mauricio Girolamo en MDZ Radio 105.5 FM