Las últimas lluvias empiezan a dar alivio a la situación de sequía en Córdoba

Las últimas precipitaciones que se registraron en Córdoba y las que anuncia el Servicio Meteorológico Nacional para los próximos días, comienzan a dar cierto alivio a la situación de sequía que viene atravesando la provincia mediterránea como consecuencia del fenómeno de “La Niña”.

Si bien el ingreso de las crecientes de entre 2 y 3 metros en los ríos serranos el domingo no fueron un gran paliativo a la crisis hídrica, se espera que los niveles de los diques y embalses comiencen paulatinamente a elevarse. Esto permitiría ir normalizando de a poco el servicio de agua potable en algunas localidades que ya aplican restricciones a su uso.

Uno de los sectores más afectados con estas medidas fue el de las Sierras Chicas. Allí, el Dique La Quebrada, abastece a localidades como Río Ceballos, Unquillo, Mendiolaza o Salsipuedes, que aumentaron en el último año su cantidad de pobladores, por su cercanía con la ciudad de Córdoba. 

Las restricciones consisten en prohibir el lavado de veredas y de autos; el llenado de piletas; la limpieza de tanques; el riego de calles, jardines y parques; y cualquier tipo de derroche de agua y uso que no sea para consumo humano.

En los últimos años, estas localidades aplican cortes rotativos del suministro de agua por barrios, ante la bajante del embalse La Quebrada. Aunque tras las últimas lluvias, el dique La Quebrada subió casi dos metros ubicándose en 12,24 metros menos de su cota máxima y el río Salsipuedes volvió a mostrar más caudal después de meses seco. Sin embargo, las altas temperaturas que se vienen registrando en la provincia  no ayudan tampoco a reducir los niveles de consumo.

Lagunas que se secaron

Otro de los sectores que sufren la crisis hídrica es el agropecuario, en especial en el sur de Córdoba. Para muestra vale señalar que la llamada “Laguna Brava”, ubicada entre las localidades de La Carlota y Canals, simplemente desapareció y quedó sin flora ni fauna.

Ubicada en el Departamento Unión, la laguna ocupaba unas 100 hectáreas y hoy apenas un charco. Se trataba de un importante reservorio de agua con entre 3 y 4 metros de profundidad.

Y, según informó el diario local El Puntal, Laguna Brava se une a otro espejo de agua que desapareció en el departamento General Roca. Se trata de la laguna conocida como “Bajo de Fornasari”, situada a unos 8 kilómetros al sur de Huinca Renancó. Allí se habían sembrado pejerreyes para la pesca y solía atraer flamencos y distintas especies de aves acuáticas. Hoy es un desierto.

La situación de los diques

Según el reporte que emitió este martes el Ministerio de Servicios Públicos provincial, a través de la Administración Provincial de Recursos Hídricos, los diques y embalses de Córdoba se encuentra en todos los casos muy por debajo de su nivel habitual a esta altura del año.

El dique San Roque tiene un nivel 30,85 metros cuando su cota máxima es de 35,30 metros. En el caso de La Viña su nivel es de 87,76  metros y su máximo es de 100,50). Lo mismo con Los Molinos (46,56/53), el dique La Quebrada, el nivel es de 21,81 cuando el máximo es 34 metros; en Pichanas se encuentra casi 10,5 metros debajo de su máxima capacidad y El Cajón a 5 metros menos de su máxima de 30,20 metros. En la jornada, no se informaron datos sobre el nivel de los diques Embalse (máxima: 46,50 metros) y Cruz del Eje (máxima 37,20 metros).

Por su parte, la Secretaría de Gestión de Riesgo informó que en la tarde del martes se espera que empiecen a desarrollarse ciclos de precipitaciones y tormentas temporarias en diversos sectores de Córdoba. En las zonas serranas y el sur provincial podrían tener tormentas más aisladas pero con acumulados también relevantes entre 20 a 35mm de agua. Se destacó también que se podrían generar, dentro de los episodios de tormentas, fuertes ráfagas superiores a 80-90 km/h.

Se espera que las condiciones climáticas vayan mejorando recién durante la tarde y noche del miércoles. Aún así, el pronóstico extendido anuncia precipitaciones hasta el viernes 27.