La guerra en Ucrania profundiza la crisis alimentaria en Latinoamérica

Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), organismo dependiente de la ONU, América Latina y el Caribe producen alimentos para satisfacer necesidades para 1.300 millones de personas, es decir, la sexta parte del mundo. Sin embargo, mas allá de tener la capacidad de producir alimentos para toda su población, el modelo agroexportador que predomina en el continente podría generar que se profundice su crisis alimentaria, como consecuencia de la invasión rusa a Ucrania.

Las sanciones a Rusia, la retirada de Ucrania del mercado internacional y la prohibición en India de exportar trigo, da la posibilidad a los latinoamericanos de cubrir esos espacios pero puede ser en detrimento de su población. A esto hay que agregar que en esta región la producción es un 300 por ciento mas costosa a causa del conflicto, que influye negativamente tanto en fertilizantes como combustibles; engrosando los costos y así mismo los precios de los consumibles agropecuarios.

El estudio que presentó la FAO menciona como ejemplo a Brasil y Argentina que dependen principalmente de fertilizantes rusos y bielorrusos de bajo costo. Además, señala que los países del Caribe son los más perjudicados por estos aumentos, dado que la mayoría de los alimentos que consumen provienen de la importación.

Llama la atención que, siendo un gran productor de alimentos, el continente no puede garantizar el acceso a los mismos para sus habitantes. Los altos costos de producción y un alto desperdicio de alimentos por cosechas tempranas o tardías, condiciones climáticas desfavorables que se profundizan con el cambio climático y las dificultades para comercializar, son algunos de los aspectos que clave en este problema.

Desde la FAO, también aclaran que alimento no es lo que le falta a la región, sino que estos son caros y mucha parte de la población termina comprando productos de peor calidad. De hecho, América es el continente donde es más caro comer sano y esto deriva en una alimentación muy desequilibrada en gran parte de la población que sufre pobreza.

Como solución, se plantea la coexistencia del agronegocio a gran escala para la exportación con una promoción agroecológica de nivel local que baje los costos y permita mayor accesibilidad.